El Club Atlético María Grande se encuentra transitando un momento de profunda transformación institucional, justo cuando se prepara para celebrar sus 100 años de vida el próximo domingo 10 de agosto. En este contexto tan significativo, la figura de Julio Schmidt se destaca como un actor clave. Desde que asumió la presidencia, su gestión se ha caracterizado por una visión integral del desarrollo del club, con énfasis en la infraestructura, el deporte y el vínculo con la comunidad.
Julio Schmidt y el futuro del Club Atlético María Grande en su año de centenario
Julio Schmidt, quien preside al Club Atlético María Grande en el año de su centenario, habló con UNO sobre el crecimiento de la institución.
Por Gerónimo Flores
Vitales. Ellos son quienes, con trabajo diario, construyen el presente y siembran el porvenir del Club Atlético María Grande.
Una de las intervenciones más celebradas ha sido la renovación total del piso de la cancha de básquet. Esta obra no solo responde a una necesidad estructural postergada durante años, sino que además eleva el nivel del espacio deportivo, permitiendo que las distintas categorías entrenen y compitan en condiciones óptimas. Es una mejora que impacta directamente en la calidad de la formación de los jóvenes y que también abre la puerta a la realización de eventos de mayor envergadura.
Campus de Lanzamiento por los 100 años
En el plano deportivo, el club vivió uno de los momentos más emocionantes de las últimas décadas. El equipo de fútbol masculino alcanzó el subcampeonato en la Copa Entre Ríos, una hazaña histórica que volvió a despertar la pasión de toda una ciudad. La campaña, repleta de esfuerzo, identidad y compromiso, dejó una huella imborrable tanto en el plantel como en la hinchada.
A esto se suma un hecho que trascendió lo deportivo: la sede de la institución fue escenario de un evento sin precedentes en la localidad. Las copas obtenidas por la Selección Argentina (incluyendo la del Mundial de Qatar 2022) fueron exhibidas en sus instalaciones. La jornada se vivió con una enorme carga simbólica y emotiva, convirtiendo al espacio en un punto de encuentro para cientos de vecinos que se acercaron a vivir un momento único.
El centenario encuentra al Club Atlético María Grande fortalecido, con obras concretas, logros deportivos significativos y un sentido de comunidad renovado. Todo ello es reflejo de una conducción comprometida y presente. Julio Schmidt lidera este proceso con una mirada que articula pasado, presente y futuro, buscando posicionar al club como una referencia regional en lo deportivo y social.
Julio Schmidt habló con Diario UNO sobre la actualidad del club
En conversación con UNO, Julio reflexionó sobre su rol al frente del Club Atlético María Grande en el año de su centenario, destacando la gran responsabilidad y satisfacción de liderar la institución en un momento tan significativo.
—¿Qué representa para usted liderar la institución en un momento tan simbólico como el año de su centenario?
—Sin lugar a dudas, es un orgullo enorme. Te diría que incluso representa algo muy especial, porque mis papás siempre estuvieron profundamente involucrados en el club. Mi papá fue utilero durante más de 20 años y mi mamá colaboró en distintas subcomisiones. Además, era la que se encargaba de lavar los equipos de los planteles de fútbol. Crecí viendo todo eso, por eso, mamé los colores del club desde muy chico. Fui jugador, técnico, dirigente en distintas etapas y hoy me toca estar en la presidencia. Disfruto muchísimo de esta posibilidad, que además, conlleva una gran responsabilidad.
—¿Cuáles fueron las principales prioridades cuando asumió la gestión?
—Era sostener el camino trazado por la comisión anterior, encabezada por Maximiliano Azaad, de la cual también formé parte, aunque en un rol menor. Acompañé las gestiones de Azaad durante varios años y entendía que el club venía con una base muy sólida, por lo que el objetivo era mantenerla y, en lo posible, mejorar distintos aspectos. Documentación en regla, balances presentados en tiempo y forma, y una situación impositiva clara. A partir de esa base, nos propusimos seguir creciendo. Uno de los focos fue aumentar la cantidad de socios y para eso, lanzamos una campaña que tuvo muy buenos resultados.
—¿Qué importancia le asigna a la renovación del piso de la cancha de básquet en el desarrollo del club?
—En lo que respecta al mejoramiento de la infraestructura, tuvimos una gran oportunidad gracias a los aportes recibidos por los derechos federativos de Milton Casco. Con esos fondos, se pudo adquirir un nuevo predio, que aunque aún está sin desarrollar y requiere una inversión importante, ya forma parte del patrimonio institucional y cuenta con una muy buena ubicación. También, se concretaron otras mejoras importantes. En el predio La Manzanita, contiguo al estadio Conrado Schamle, se construyó una cancha de pádel de blindex y se logró cumplir con un viejo anhelo para los grupos de básquet y vóley, renovar por completo el piso del gimnasio. Se trata de una obra que significó una inversión de 55.000.000 de pesos, que ya está completamente paga. Esto fue posible gracias al aporte personal de socios muy comprometidos, que sienten al club como propio y colaboraron para hacerlo posible.
—¿Cómo vivió la histórica campaña del equipo de fútbol masculino en la Copa Entre Ríos?
—Fue realmente algo histórico. Haber llegado a la final representó un logro muy importante, no sólo para el club, sino también para la localidad y toda la región de Paraná Campaña. A cada partido asistía gente de distintas localidades, que se sumaba con entusiasmo y nos acompañaba de manera masiva. También, los clubes de la zona nos brindaron un apoyo constante, enviando mensajes de aliento y compartiendo nuestra ilusión, lo que demuestra el fuerte sentido de comunidad que existe en nuestro fútbol. Nuestro agradecimiento es para todos ellos, para los hinchas que nos acompañaron en cada etapa del torneo y para los clubes que, con su respaldo anímico, fueron parte de esta campaña inolvidable.
—¿Qué impacto tuvo para María Grande recibir la exhibición de las copas de la Selección Argentina?
—En el marco del centenario, tuvimos la posibilidad de recibir en nuestras instalaciones las tres copas ganadas por la Selección Argentina, la Copa del Mundo, la Copa América y la Finalissima. Fue un hecho realmente increíble, un suceso que marcó para siempre la historia del club. No solo fue trascendental para María Grande, sino también para toda la región de Paraná Campaña. Se vivió con muchísima emoción. Cientos de chicos y chicas, tanto de nuestra localidad como de escuelas de zonas cercanas, se acercaron para sacarse esa foto histórica con los trofeos. Ver la alegría en sus caras fue algo inolvidable.
—¿Qué legado le gustaría dejar cuando finalice su mandato?
—Estos dos años han sido una experiencia inolvidable para mí. Han requerido mucho esfuerzo, dedicación y compromiso, aunque también me han colmado de orgullo. Hoy puedo decir con absoluta convicción que el Club Atlético María Grande está bien arriba, en un lugar de relevancia y respeto. Mi deseo es que las comisiones que vengan después continúen con esta impronta, con esa energía, esas ganas y esa pasión puestas en el desarrollo institucional. Porque más allá de lo deportivo, es fundamental seguir construyendo bases cada vez más sólidas que nos permitan crecer y proyectarnos a futuro.