El fútbol es el deporte más popular de la República Argentina. Y bajo ese fundamento, es tan abarcativo en todos los aspectos de la vida que se vuelve cada vez más común rendirle homenaje a algún futbolista. Pasó desde siempre. La figura de Maradona, inmortalizada en la piel de millones de compatriotas, es la que más sobresale a la hora de hacer un recuento general.
Homenaje a Fernando Zampedri, el entrerriano que la descose en Chile
Elio es hermano del futbolista profesional Fernando Zampedri y, para rendirle homenaje a su sangre, decidió inmortalizarlo con un tremendo tatuaje.
Por Alan Barbosa
Pero después podemos mencionar miles y miles de nombres y apellidos del ámbito deportivo. Desde Lionel Messi hasta Maravilla Martínez, desde Franco Colapinto hasta Juan Martín del Potro. Pero también hay historias que están a la vuelta de la esquina. Este es el caso de Elio Zampedri, hermano de Fernando Zampedri, máximo goleador histórico de la Universidad Católica de Chile, que decidió rendirle un homenaje con un tatuaje de su rostro en una de sus piernas.
Para profundizar, la familia Zampedri es de Chajarí, Entre Ríos. Allí son fanáticos del Club 1ro de Mayo, una de las instituciones con más títulos de liga local (15). En el Decano hizo sus primeras armas Fernando. Luego pasó por Atlético Rafaela, Sportivo Belgrano, Crucero del Norte, Guillermo Brown de Puerto Madryn, Boca Unidos, Juventud Unida de Gualeguaychú, Atlético Tucumán, Rosario Central y, actualmente, milita en el fútbol chileno.
La temporada, para algunos equipos, llegó a su fin hace un par de semanas. Ese receso lo aprovechó el Toro para viajar hasta el norte entrerriano y visitar a su familia. Lo que el no sabía, era que durante su estadía en Chajarí su hermano, Elio, le tenía una sorpresa: un tatuaje con su cara.
“La idea surgió en una convención de tatuajes. El que organizaba, Ariel Baldessari, me comentó lo que quería hacer y me encantó. Primero no estaba muy convencido, porque no sabía como iba a quedar, pero quedó fantástico. Incluso superó mis expectativas”, comenzó el hermano de Fernando su relato a UNO. A su vez, detalló el tatuaje: “Está hecho en realismo y eso no cualquiera lo hace. Sin embargo, Ariel le agregó otros detalles, como un toro al costado, y eso le dio otro tono al retrato que quedó muy bueno”.
“Cuando lo vió no lo podía creer. Casi se largó a llorar. Estaba re contento”, agregó Elio que se lleva aproximadamente 15 años de diferencia con Fernando.
“En la familia estamos todos orgullosos de mi hermano. Fernando nunca perdió la humildad, en ningún momento. Llegó a lo más alto y sigue siendo la misma persona de siempre. Desde chico que la peleó, lo vi sufrir un par de veces. La luchó de abajo y no cualquiera hace 119 goles con una camiseta”, dijo, haciendo referencia a la marca que superó el Toro Zampedri en Universidad Católica.
Para cerrar, no se olvidó del club de sus amores: 1ro de Mayo “Somos todos hinchas del Decano. De la cuna al cajón. De ahí salimos y ahí quedamos. El otro día fuimos a ver los cruces de cuartos de final y por suerte pudimos ganar. Ahora a festejar que estamos en semis”.
El momento de la obra de arte
Por otra parte, UNO recopiló testimonios de Ariel Baldessari, el creador de este homenaje a un gran futbolista entrerriano: “A la sorpresa la armamos entre Elio y yo. A Fernando lo conozco desde muy chico. Jugamos al fútbol juntos por más de que no seamos de la misma categoría. Organicé todo para que salga de la mejor manera posible y el Toro tenga su merecido reconocimiento”.
“Para este tatuaje estuvimos seis horas y media. Le metí a pleno e intervení principalmente en rasgos principales como el ojo, la nariz, la boca, el mentón. Que todo eso salga perfecto y después intento recortar un poco el pelo. A este tatuaje lo exploté con un toro al costado, en forma de abstracción”, dijo Baldessari al respecto de la demora en el trabajo de esta obra de arte.
“Fernando me felicitó por el tatuaje. Hablamos un montón con él cuando viene a Chajarí. Siempre se acuerda de nosotros, de su pasado. Siempre le rescato que nunca perdió la humildad, la sencillez y lo buena persona que es. Por eso llegó a donde llegó. Hoy es figura en Chile, en otro país. Allá lo admiran todos los chilenos. De todos los clubes”, acotó el tatuador.
“Siento doble alegría porque es un amigo mío. Lo conozco prácticamente desde la infancia. Tuve la suerte de jugar con él en infantiles, él es de dos categorías menor que yo, pero jugaba con nosotros porque ya la rompía. Físicamente era potente, ya tenía nuestra estatura con dos años menos. Hacía la diferencia, era un crack. Cuando se fue le seguimos el rastro. Durante toda su carrera desde que se probó en Rafaela y los momentos en los que tuvo que buscar continuidad en algunos clubes del interior hasta que llegó a Atlético Tucumán, donde la rompió toda. Después hizo el salto a Rosario Central y su gran momento en Chile, donde es figura y lo saludan con respeto todos los hinchas del fútbol chileno”, cerró Ariel, feliz por el presente del Toro.