Con la llegada de los días más templados o calurosos suelen sumarse nuevos clientes a las dietéticas, buscando bajar de peso o implementar hábitos que contribuyan a mejorar el aspecto físico. Sin embargo, es un rubro que trabaja de manera constante todo el año, gracias a una demanda impulsada por una mayor conciencia sobre la alimentación saludable como estilo de vida.
La alimentación saludable impulsa la demanda en dietéticas
Por Vanesa Erbes
Vanesa Erbes/ UNO
Así lo confirmó a UNO Yanina, quien atiende en una dietética de calle Urquiza, en Paraná: “Desde septiembre y octubre hay más personas que se empiezan a cuidar para verse mejor, así que últimamente está habiendo más movimiento. Hay hábitos nuevos que se están incorporando y la temperatura también nos ayuda a modificar el consumo de alimentos en algún punto”.
A su vez, observó: “Más allá de eso hay más personas de todas las edades y de cualquier sexo que van tomando conciencia sobre la alimentación saludable. Porque más allá de la parte estética, tienen en cuenta la salud y buscan contrarrestar la diabetes, el colesterol y otras enfermedades en las que una dieta es clave, así que se cuidan muchísimo en eso. Están además los que tienen intolerancia a la lactosa y por ende no puede consumir lácteos; la gente celíaca, que cada vez hay más y desde más temprana edad que encuentran que hay un mercado que amplió su oferta y son cada vez más los productos específicos que se ofrecen”.
“Por ahí la gente viene y nos pide asesoramiento sobre qué puede llevar, más allá de que vaya la nutricionista. Aparte, corresponde que los orientemos, porque hay gente que no sabe sobre las posibilidades que hay de alimentarse de otro modo, y para eso nos capacitamos,para poder dar un buen asesoramiento”, afirmó.
El veganismo es una corriente que también se fue expandiendo en Paraná y le aportó mayor caudal de clientes en las dietéticas, y sobre este punto, la vendedora comentó: “Hay mucha más variedad que antes de productos para quien no consume nada de origen animal”, dijo.
Sobre las opciones más buscadas al momento de hacer una provista, sostuvo: “Viene leche sin lactosa, por ejemplo, y también hay de almendra, de coco; están las mermeladas sin azúcar, toda la línea de edulcorantes; la manteca clarificada, que reemplaza a las mantecas comunes; además llevan mucho el aceite de oliva, el de uva, el de coco, que es el que más se consume ahora. Las personas con hipertensión o con retención de líquidos buscan la sal sin sodio o la sal marina. Después hay gran demanda de frutas secas y de cereales, que en general prefieren lo que se vende suelto, que garantiza que no está procesado, no viene envasado y tiene alta rotación. Y los que se quieren dar un gusto optan por chocolates, alfajores o barritas sin azúcar. Es variado”.
Una tendencia que creció en los últimos años es evitar las harinas refinadas de trigo y al respecto, Yanina señaló: “Se puede reemplazar este tipo de harina por la harina de almendras, la de coco, la de garbanzo o de centeno”.
Además de los alimentos, hay suplementos que se imponen y en la actualidad el colágeno hidrolizado lleva la delantera: “Tiene gran demanda de gente de todas las edades. Viene solo, o con vitamina E, o con maca; hay mucha variedad de suplementos. Sirve por ejemplo, para los dolores musculares, articulares, aparte para reforzar el pelo, la piel cuando está reseca o tiene una mala pigmentación, las uñas si están quebradizas. Viene en comprimidos o en polvo. En comprimidos, por ejemplo, el envase de 90 unidades cuesta 10.000 pesos y es para tres meses. Y si no en polvito, para el mes completo, sale 3.500 pesos. Tiene mucha demanda porque están muy difundidos y probados sus beneficios”, añadió.
También el uso de aceite de cannabis está más extendido y precisó: “Los llevan muchas mamás con nenes autistas que lo consumen, y además mucha gente grande que lo utiliza para todo lo que son dolores articulares, musculares, insomnio. El frasco sale 4.000 pesos y tenemos ahora una promoción de 3x2: llevan tres frasco y pagan 8.000”.
Por su parte Marisa, propietaria de una dietética de calle San Martín que funciona hace más de 15 años, analizó: “En esta época del año lo que más buscan son cosas para adelgazar. Pero al margen de esta demanda puntual, todo el año se vende de todo, porque se han cambiado mucho los hábitos de consumo. La gente se cuida más y tiene más conciencia sobre los beneficios de la vida saludable, y lo importante es que tengan una rutina con los cuidados diarios”.
También coincidió en que mucha gente busca reemplazar la harina de trigo y le piden asesoramiento sobre qué llevar. Entre las opciones con más salida se incluyen las harinas de garbanzo, de centeno, y además las legumbres. “Hay cosas que por ahí se ponen de moda. En este momento lo que más se usa son los productos sin harina, las dietas son TACC, las dietas keto, con eso están como locos. Entonces buscan alternativas de harinas distintas que no sean las comunes, como por ejemplo de centeno. Hay un montón de opciones en esto y se preparan con recetas, así que los orientamos en qué pueden ir mezclando para hacer panes o galletitas multicereales. También nos piden reemplazos para los lácteos o que sean sin lactosa, cosas sin azúcar y demás. Está muy variado el tema del mercado”, aseguró, y subrayó: “Nos piden todo el tiempo asesoramiento, por más que lo traiga las indicaciones de un nutricionista, y como conocemos los productos, los sabemos orientar.
Sobre este punto, acotó: “Hay de todo, tenemos productos envasados y se venden muchas cosas sueltas, frescas y con mucha rotación, que es en lo que nosotros nos enfocamos en este trabajo”.
Además, mencionó que la cúrcuma, una raíz a la que se le atribuyen numerosas propiedades y viene en diferentes presentaciones, está en auge: “Estamos a tope con la cúrcuma. Es súper desintoxicante y más allá de que mucha gente hace varios años la viene utilizando y anda muy bien en el mercado, actualmente se popularizó y se vende muchísimo”.
Brenda, quien atiende otra dietética de calle Urquiza, concordó: “Hay más conciencia sobre alimentación saludable y la gente consume un montón de estos productos. Se cuida más, pregunta precios también, mira las etiquetas a ver si algo tiene hidratos de carbono, azúcar y demás.
“Creo que muchas más personas cuidan por una cuestión de salud, porque los médicos les indican bajar el colesterol, la diabetes. Y están los que se cuidan por lo estético. Y por otra parte, los que adhieren a alguna filosofía como el veganismo, y para ellos hay cada vez más opciones en el mercado, como alfajores y otras golosinas, harinas, snacks; hay de todo”.
Con respecto a los precios, en las dietéticas consultadas coincidieron que en el rubro suben al ritmo de la inflación. Y en cuanto a si alimentarse de manera saludable es más caro, Marisa reflexionó: “Estoy hace años en esto y no es así. Más caro va a ser el día de mañana que tengas que cuidarte y recurrir a los medicamentos si no te alimentaste bien antes. Hay que tener una rutina”.
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En tanto, Yanina concluyó: “Hoy en general comer es caro. Y si bien comer saludable es un poco más costoso, hay que ver cuánto gana uno en salud”.
Expansión
Al igual que en muchas otras ciudades, en los últimos años las dietéticas proliferaron considerablemente en Paraná, gracias a una demanda que también se expande. Al respecto, Brenda, quien tiene su local hace siete años, observó: “Hay un montón de dietéticas, antes solamente había lugares de este tipo más en el centro, pero ahora han abierto un montón de dietéticas en barrios”.
Sobre este tema, Marisa señaló: “Si bien hay un montón de dietéticas, no todas saben orientar a la gente. Muchas personas nos piden asesoramiento sobre los productos, como por ejemplo los diabéticos. Y lo importante es que quien esté al frente de un negocio como este tenga una orientación sobre lo que va a trabajar”.