Vecinos de varios barrios de Paraná se quejan por la falta de agua potable o la baja presión que los aqueja desde hace varios días en distintos puntos de Paraná. Hubo quejas desde la zona oeste, en inmediaciones del hipermercado de calle Larramendi, desde San Agustín, y en la zona sur, barrio Santa Lucía, Antonini, Avenida de las Américas y Empleados de Comercio.
Agua potable: vecinos de varios barrios reclaman el servicio
Este miércoles hay merma de agua en barrio Paraná V, Hipódromo y el casco céntrico por el enlace de nuevas cañerías, correspondiente a los trabajos complementarios de la obra integral en calle Racedo. La tarea se extenderá hasta las 16.
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Consultada al respecto, Alicia Glauser, referente de la Asamblea Vecinalista de Paraná indicó que, desde Obras Sanitarias de la Municipalidad le explicaron que los cortes de agua afectan sobre todo a las zonas altas y que se debe al retiro del río de una de las bombas extractoras, aquella que alimenta el centro de distribución de avenida Ramírez, debido a los inconvenientes provocados por la bajante del río Paraná. "Sacaron de circulación una de las bombas que aporte el 40% del agua".
Entre los inconvenientes mencionados por los vecinos están: cortes de agua, escasa presión, turbiedad y salinidad.
Muchos de los problemas de salinidad y turbiedad se debe a la puesta en funcionamiento de los pozos de agua para sortear la emergencia. "En barrio Empleados de Comercio el agua llega salada y mezclada por que es agua de pozo. Pusieron en vigencia los pozos de agua ubicados en calle General Espejo y distribuyen el servicio a la zona con dificultades, pero no alcanza el caudal para toda la población", indicó.
Por otra parte, en San Agustín la situación se complicó por la rotura de un caño maestro que se terminó de arreglar el martes. "En San Agustín la presión se normalizará en la tarde de este miércoles", aportó y agregó: "En Santa Lucía, ayer, el agua salía turbia porque, al poner en funcionamiento las cañerías de los pozos que estaban fuera de servicio, el agua arrastra sedimentos y hay que purgar las cañerías para que deje de salir turbia.
Muchas perdidas se dan por rotura de cañerías antiguas, falta de obras y el derroche de los vecinos.
Un problema reiterado
Cada año Paraná tiene problemas con el agua potable, generalmente por el derroche del verano. Pero, desde el año pasado, con la bajante inusitada del río Paraná, los problemas se generalizaron y se agravaron tanto que la Municipalidad de Paraná declaró la emergencia hídrica.