La premisa de Atlético Paraná era sumar en el noroeste del país para continuar liderando en soledad. Si podía hacerlo de a tres, mucho mejor. El Decano terminó con la garganta Roja en el estadio Don Antonio Romero, donde goleó por 4 a 1 a Independiente de Formosa, en uno de los encuentros correspondiente a la quinta fecha de la segunda fase del Torneo Argentino B, Zona F.
La garganta roja
El elenco dirigido por Edgardo Cervilla gozó de la capacidad goleadora de sus delanteros. Matías Benítez se sacó la mufa y con dos gritos cortó una serie de seis jornadas sin conquistas personales. Fernando Benítez colaboró con la causa con otro tanto.
Primer tiempo. Más allá de las elevadas temperaturas (la térmica merodeaba los 40º), Atlético Paraná fue a buscar de entrada la diferencia. Vercellino tuvo el gol en dos ocasiones en apenas 120 segundos. Pedroso le negó el grito en el primer intento al despejar el peligro sobre la línea. Luego fue Vellido quien le atragantó el grito al concordiense.
Independiente tenía la posesión del esférico, pero no tenía profundidad. La visita, de contragolpe, generaba situaciones claras de riesgo. De esa manera se puso en ventajas a los 28’ luego de un centro que envió Galli y que Matías Benítez lo capitalizó para abrir el score.
El Decano defendió con criterio la diferencia. El Rojo solo inquietó en el cierre de la etapa inicial con un desborde de Navarro que Dri bloqueó para que la redonda muera en las manos de Baigorria.
Contundente. El local intentó por todos los caminos llevar peligro al área Decana, pero chocó con un muro de jugadores vestidos de rojo y blanco. Cuando superó la línea de los defensores encontró la seguridad de Baigorria.
Cervilla movió el banco y apostó a la frescura de Ekkert por un extenuado Trinidad. La variante fue determinante ya que en su primera intervención el diamantino asistió a Fernando Benítez, quien con un cabezazo aumentó cifras.
Independiente se desordenó por complemento. Una nueva aparición de Ekkert desencadenó en el tanto de Piris, quien cerró la persiana. El local, tocado por su orgullo, descontó con un remate de Gallo. Paraná cerró el partido con un nuevo grito de Matías Benítez, para terminar con la garganta roja.