"Esto significa –continuó– que se comenzó un proceso de discernimiento para crecer. Y se hace en la medida de las posibilidades del Obispo, ya que ellas dependen directamente del Papa. Hablar de prácticas exageradas, se los concedo... pero... hablar de "torturas"... es bastante exagerado... ¿no?".
Sacerdote negó torturas pero admitió que había "prácticas exageradas"
Fabián Castro, cura de la Arquidiócesis de Paraná, publicó en su blog un artículo cuestionando el accionar de la Justicia. Sin embargo, reveló que desde el mes pasado hay "visitas pastorales" al convento de las Carmelitas de Nogoyá.
26 de agosto 2016 · 19:31hs
"En el Convento se estaban dando algunas prácticas exageradas que motivaron visitas pastorales de mi Obispo. Estas visitas comenzaron en el mes de julio", escribió en su blog el sacerdote Fabián Castro, en el final de un artículo en el que analizó el caso de las supuestas torturas en el convento de las Carmelitas Descalzas de Nogoyá, que motivaron un allanamiento en la sede religiosa.
Castro, a quien siguen muchos católicos en los medios sociales, siguió en su escrito la misma línea del arzobispo Juan Alberto Puíggari, quien dio este viernes por la mañana una conferencia de prensa. La argumentación es la de negar que existan torturas y referirse en su lugar "disciplina". Además, cuestionar el allanamiento, al que el cura llamó "profanación".
"El fiscal (Federico Uriburu) cuenta que le entregaron voluntariamente cilicios y disciplinas (...). Pero se encontró descorazonado porque no había rastro de mordazas. También dice que revisaron la biblioteca y se mostró sorprendido porque solamente tenían libros de teología y espiritualidad. La desilusión vino en este caso porque pensaba encontrar algunos manuales o tutoriales sobre como torturar con eficacia al prójimo", ironizó en su blog.
"Las cuento un secreto: una de las cosas que me preocupa es que la policía de Entre Ríos perdió por goleada con sus colegas de Buenos Aires. Es que la bonaerense allanó un monasterio y encontraron bolsos con nueve millones de dólares mientras que los locales solamente unas fustitas miserables. ¡Qué mal nos dejan, muchachos!!!", continuó.
"Seguramente que ustedes están pensando que me estoy tomando el asunto en broma. Pero no es así. En primer lugar, porque para cualquier católico es una cuestión muy seria que se irrumpa en un Convento de Clausura por las simples sospechas surgidas de una nota periodística. Para mí es muy doloroso porque considero a todo convento un lugar sagrado. En otras palabras, lo que ocurrió a mi me suena a profanación", escribió más adelante.
Prácticas "exageradas"
Castro diferenció la ascesis o mortificación que practican las monjas, del sadomasoquismo. "La ascesis es el camino de dominio del propio yo para lograr la armonía interior que permita un encuentro cada vez más pleno y profundo con Dios", sostuvo.
Además defendió al arzobispo porque el convento de derecho pontificio, es decir que "el pedazo de tierra que ellas habitan está, en lo religioso, bajo la jurisdicción inmediata del Papa. Por lo tanto el Obispo del lugar no puede tener injerencia inmediata sobre lo que allí ocurre".
Sostuvo que las reglas que las religiosas eligen respetar fueron aprobabas el Papa Juan Pablo II y aclaró que no las comparte plenamente. "Yo, particularmente, no creo que sea el más conveniente", señaló. De todos modos, comparó: "¿Acaso la dieta, que ya están comenzando algunas en vista al veranito, no es una mortificación? O con algunos hombres que hacen horas de gimnasio semanal para lucir un esculpido dorsal...".
Finalmente remarcó: "Sentado esto, simplemente comentarles que en el Convento se estaban dando algunas prácticas exageradas que motivaron visitas pastorales de mi Obispo. Estas visitas comenzaron en el mes de julio. Esto significa que se comenzó un proceso de discernimiento para crecer. Y se hace en la medida de las posibilidades del Obispo, ya que ellas dependen directamente del Papa. Hablar de prácticas exageradas, se los concedo... pero... hablar de 'torturas'... es bastante exagerado... ¿no?".