Víctimas, ambientalistas, médicos y técnicos de todo el mundo brindarán, durante el fin de semana, su testimonio en el primer Tribunal Internacional Monsanto, una iniciativa inédita en la que participarán más de 1.000 organizaciones en la localidad de La Haya, en los Países Bajos, para reunir la prueba sanitaria y jurídica que sirva para incorporar la figura de "ecocidio" a los delitos juzgados por Corte Penal Internacional y el aumento de los casos de cáncer de San Salvador estará presente en tamaña actividad.
El aumento del cáncer en San Salvador estará presente en La Haya
El médico Damián Verzeñassi es impulsor de los Campamentos Sanitarios y varios de ellos fueron realizados en Entre Ríos. Declarará en una corte Civil y simbólica en contra de Monsanto
14 de octubre 2016 · 06:20hs
Entre los argentinos participantes en la actividad del fin de semana, se encuentra Damián Verzeñassi, impulsor de los Campamentos Sanitarios que se realizan desde la Facultad de Ciencias Médicas (FCM) de la Universidad Nacional de Rosario (UNR). En junio se conocieron los resultado del realizado en San Salvador y el debate volvió a ponerse sobre la mesa. Por primera vez, la comunidad civil internacional se organizó a los fines de juzgar, a nivel simbólico, a una de las empresas agroindustriales más grandes del mundo y lo harán por crímenes contra la humanidad. Se trata de una especie de tribunal popular, sin valor jurídico real. El jurado del tribunal, creado a iniciativa de un grupo de activistas, evaluará los posibles daños causados por la multinacional estadounidense a la salud humana y al medio ambiente.
Un grupo de expertos –según consignó La Capital de Rosario– escuchará testimonios de víctimas y ofrecerá luego una opinión consultiva, siguiendo procedimientos de la Corte Penal Internacional de Justicia. La magistrada argentina Eleonora Lamm será una de los cinco jueces que participarán del proceso. También lo hará Damián Verzeñassi, único médico que dará su testimonio en representación de Latinoamérica. Los Campamentos Sanitarios tienen como fin recopilar información sobre enfermedades y causas de muerte. Argentina se encuentra entre los países que más utilizan el glifosato, ya que es donde más creció el cultivo de organismos genéticamente modificados como la soja.
Desde hace seis años, los futuros médicos de la vecina provincia realizan estas iniciativas de campo, donde recopilan información en diferentes poblaciones vinculadas a la producción agropecuaria. Detectaron un aumento considerable de casos de cáncer, hipotiroidismo, obesidad, infertilidad, abortos espontáneos y malformaciones, entre otros, que atribuyen a las fumigaciones con glifosato. Por eso, el creador de estos campamentos, Verzeñassi, es uno de los invitados a prestar testimonio en La Haya. "El principal objetivo de este proceso es que se pueda dar entidad jurídica a la figura de "ecocidio'", señaló el especialista a Télam, y sostuvo: "También será importante escuchar la voz de todas las víctimas de este modelo extractivista e industrial veneno-dependiente, y que desde este lugar emblemático como es La Haya sus voces cobren más dimensión y se repliquen mucho más fuerte a nivel internacional".
Algunos de los campamentos sanitarios fueron realizados en distintas localidades entrerrianas, entre otras, San Salvador. Sobre el relevamiento hecho en 2015, Verzeñassi señaló: "Entre 2000 y 2014, en 80 de los hogares visitados se refirieron 84 casos de cáncer diagnosticados, de los cuales el 46,4% se había dado en los últimos cinco años". Además, en junio, junto con los resultados, se conoció que el polvillo de la ciudad entrerriana contiene alta carga química y de partículas, lo que genera un gran crecimiento de patologías respiratorias.
Desde el Comité Organizador de la actividad internacional, acusan a Monsanto de producir y comercializar productos que afectan la fertilidad humana y animal; uno de los componentes del Agente Naranja que causa malformaciones congénitas; un herbicida prohibido en Europa; y el glifosato, el herbicida causante de uno de los mayores escándalos sanitarios y medioambientales actuales, destacaron.
Monsanto desmiente que el glifosato sea peligroso. En una carta abierta, la compañía alegó sobre la iniciativa: "Es un evento escenificado, un juicio simulado donde los críticos de la tecnología anti-agricultura y anti-Monsanto juegan el rol de organizadores, jueces y jurado, y donde el veredicto está prefijado".