River Plate y Colón de Santa Fe pusieron en juego algo así como el cetro de "mejor del año" en Santiago del Estero, la provincia que intentó conquistar al fútbol argentino este año a partir de la inauguración de un estadio con estilo mundialista, que es sede de una nueva final, tal como sucedió con la de la Supercopa y la Copa Argentina. Esta vez, el trofeo quedó en manos del Millonario que volvió a gritar campeón.
River goleó a Colón y conquistó el Trofeo de Campeones
EL INGRESO DE LOS EQUIPOS
Un calor agobiante recibió a los protagonistas. River llegó ayer y Colón está desde el jueves. Y el estadio Madre de Ciudades, el cual cuenta con un aforo de 25 mil personas, está repleto. Una mitad es roja y blanca y la otra negra y roja.
Tras algunos instantes de estudio, la primera insinuación fue del Sabalero. Eric Meza le ganó en velocidad a Milton Casto y tras un error de cálculo de Héctor David Martínez tenía espacio para ingresar al área, pero decidió emitir un centro sin demasiada puntería. La respuesta del Millonario no se demoró. Luego de una buena jugada colectiva José Paradela tiró un pase venenoso que ninguno de sus compañeros llegó a conectar.
River festejó el Trofeo de Campeones en Santiago del Estero
El Negro volvió a inquietar con una pelota parada. Si bien la primera opción no llegó a destino (pase a la espalda del lateral para aprovechar la velocidad de Meza), Cristian Ferreira ganó el rebote y buscó a Rodrigo Aliendro, quien de palomita casi abre el marcador.
Los de Núñez comenzaron a encontrar espacios gracias a Julián Álvarez, su gran figura. Primero buscó ganar a pura gambeta tras un buen pase de Enzo Fernández. Poco después, la Araña ganó dentro del área e intentó con un remate cruzado, pero Leonardo Burián, con algo de fortuna, logró despejar el peligro.
El partido comenzó a ingresar en una meseta, ya que el mediocampo se convirtió en un campo de batalla, en donde ambos planteles comenzaron a prestarse la pelota y los mejores intentos fueron dos remates desde afuera del área: un remate de Ferreyra y otro de Agustín Palavecino.
Cuando todo hacía suponer que el partido se iba a ir al descanso en igualdad, el Millonario encontró la receta del gol. Paulo Díaz clarificó desde el fondo para salir con espacios. Santiago Simón desbordó y tiró un centro que Julián Álvarez no desaprovechó. La Araña le comió la espalda a Bruno Bianchi para cambiarle la dirección a la pelota y descolocar por completo al arquero rival. El golpe le dejó la mandíbula floja al Sabalero, pero los de Núñez no estuvieron finos en la última estocada.
Hasta esta jugada, los comandados por Eduardo Domínguez parecían llevar el encuentro al terreno que les era más cómodo. Minaron la mitad de la cancha e, incluso con dosis de su propia medicina (la presión alta), incomodaron a River.
En el complemento el Millonario salió decidido a querer liquidar el compromiso. Incluso tuvo una chance inmejorable (con algo de suerte en el camino) para estirar el marcador, pero Santiago Simón no estuvo fino al quedar frente al arquero. Su intento se fue por arriba del travesaño.
Colón terminó pagando muy caro una mala salida poco antes del cuarto de hora en la segunda parte. Una pared dejó a José Paradela en una óptima posición para asistir a la Araña, quien con suspenso aumentó la diferencia.
Aunque el Negro intentó reaccionar con intentos de Farías, Lucas Beltrán o Rafael Delgado, el tramite pasó a jugarse al ritmo y deseo de los del Muñeco, quienes comenzaron a encontrar cada vez más espacios en el último tercio del campo.
Los de Domínguez intentaron no bajar los brazos pero nunca encontraron los caminos y la mayoría de sus insinuaciones fueron más por empuje que por juego asociado. El Millonario, con más espacios, es letal. Julián Álvarez, la gran figura de la noche, comenzó a apilar rivales y probó desde afuera, pero su remate se estrelló contra el palo. Benjamín Rollheiser apareció solo para darle un pase a la red y de esa manera marcar su primer gol en la máxima categoría del fútbol argentino.
Los de Domínguez intentaron no bajar los brazos pero nunca encontraron los caminos y la mayoría de sus insinuaciones fueron más por empuje que por juego asociado. El Millonario, con más espacios, es letal. Julián Álvarez, la gran figura de la noche, comenzó a apilar rivales y probó desde afuera, pero su remate se estrelló contra el palo. Benjamín Rollheiser apareció solo para darle un pase a la red y de esa manera marcar su primer gol en la máxima categoría del fútbol argentino.
La frutilla del postre la puso Jorge Carrascal. El oriundo de Calchín, por si le faltaba algo, asistió de manera exquisita al colombiano, quien marcó el 4-0 definitivo con un certero remate.
FORMACIONES
River Plate: Franco Armani; Robert Rojas, Paulo Díaz, David Martínez, Milton Casco; Bruno Zuculini; Santiago Simón, Enzo Fernández y Agustín Palavecino; Benjamín Rollheiser y Julián Álvarez. DT: Marcelo Gallardo.
Colón: Leonardo Burián; Facundo Garcés, Paolo Goltz y Rafael Delgado, Eric Meza o Facundo Mura, Federico Lértora, Rodrigo Aliendro, Gonzalo Piovi y Christian Bernardi; Facundo Farías y Alexis Castro o Lucas Beltrán. DT: Eduardo Domínguez.
Árbitro: Patricio Loustau.
Cancha: estadio Único Madre de Ciudades, en Santiago del Estero.
Hora de inicio: 21.10
EL TROFEO DE CAMPEONES
¿En caso de empate?
El encuentro entre River y Colon, por la final del Trofeo de Campeones 2021, se juega en el Estadio Único Madre de Ciudad de Santiago del Estero. Si los de Núñez y los de Santa Fe empatan durante los 90' reglamentarios, el partido irá a tiempo suplementario, con dos tiempos de 15 minutos cada uno.
Este Trofeo de los Campeones tiene como único antecedente el ganado por Racing, dirigido por Eduardo Coudet, en 2019, ante Tigre, con Néstor Gorosito como DT, al vencer en Mar del Plata por 2 a 0.