La balacera contra el frente del Club Patronato, ocurrida el viernes 2 a la noche, fue la última de las acciones más agresivas de la barra brava, que derivó en allanamientos y secuestro de evidencias sobre el manejo de negocios alrededor de los partidos. Y en los últimos días se registraron movimientos en otras causas judiciales que tienen a miembros de la Barra Fuerte en el centro. Una es por el tiroteo con la Policía en la previa del partido con Instituto en 2015, por la cual están imputados el hijo del líder de la barra, Gustavo Barrientos, y un santafesino de apellido Grandoli. Estos dos no podrán concurrir más al estadio los días de los partidos, por decisión de la Justicia. Además, la Fiscalía solicitó que otros integrantes o relacionados a la barra que están imputados en una causa por Asociación ilícita tampoco puedan acercarse a la cancha, pero aún no ha habido respuesta.
Cercada por la Justicia, la Barra Fuerte está cada vez más lejos de las tribunas
Restricciones. Prohibieron ir a la cancha al hijo de "Petaco" Barrientos y a otro barra. Además, pidieron lo mismo para Hugo Ceola y otros hinchas imputados en una causa por Asociación Ilícita
18 de diciembre 2016 · 14:53hs
La primera causa mencionada es la que investiga el fiscal Juan Francisco Ramírez Montrull, tiene imputados a un menor y a Grandoli, porque fueron identificados como los dos sujetos que iban en una moto, el 25 de noviembre de 2015, guiando la caravana en la previa del partido de la semifinal de ascenso, y metros antes del estadio Grella, en Churruarín y Gorriti, se toparon con la valla policial y dispararon con una pistola calibre 9 milímetros contra los uniformados. No hubo heridos y algunos de los 15 balazos dieron contra el frente de una peluquería y viviendas aledañas.
Luego de las imputaciones realizadas a principios de octubre, ahora el fiscal pidió que se implemente la ley que establece el Régimen Penal y Contravencional para la Prevención y Represión de la Violencia en Espectáculos Deportivos. La misma establece: "En todos los procesos que se sustancien como consecuencia de alguno de los delitos contemplados en la presente ley (...) el juez (...) podrá disponer en forma cautelar que el imputado se abstenga de concurrir a todo tipo de espectáculo deportivo de la especie que se trate mientras dure el proceso". Y luego se indica que esta prohibición "se hará extensiva hasta un radio de 500 metros a la redonda del estadio o predio en el que se desarrolle la práctica deportiva, mientras dure la misma, sus preparativos y desconcentración".
En este sentido, Ramírez Montrull solicitó al juez de Garantías Mauricio Mayer que ni el menor ni Grandoli puedan asistir a la cancha de Patronato. El magistrado, luego de analizar las circunstancias del grave episodio que se investiga, y al observar que el mismo se corresponde con hechos previstos en la ley ("con motivo o en ocasión de un espectáculo deportivo"), hizo lugar a la solicitud y le impuso la restricción a ambos imputados.
Mientras, se está analizando el destino que tendrá esta causa en cuanto a la sanción penal para los acusados. Las pruebas, que llevó tiempo analizar, son principalmente las imágenes de las cámaras del 911 que muestran a ambos a bordo de la moto desde la que salieron los disparos. Respecto del menor, se podría resolver con alguna medida alternativa en caso de que se dicte una sentencia de responsabilidad en el hecho y se pase la causa al Juzgado Penal de Niños y Adolescentes. Y sobre Grandoli podría caber también una solución de este tipo o una pena condicional. Todo depende del diálogo y si hay acuerdo entre el fiscal y los imputados, que son defendidos por Marcos Rodríguez Allende, de lo contrario la causa iría a un juicio.
Por el momento, la Barra Fuerte se queda sin dos de sus principales soldados en las tribunas.
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Van por otros soldados
La causa que investiga el delito de Asociación ilícita tiene a una docena de imputados, entre ellos el líder de la Barra Fuerte, Gustavo Petaco Barrientos, y otros integrantes de la misma, como un hermano, su esposa, y su ladero Hugo Ceola.
Si bien los hechos que se investigan en esta causa no están vinculados directamente a un episodio de violencia en el marco de un partido de Patronato, en las escuchas telefónicas surgieron datos sobre maniobras y negocios relacionados a los espectáculos deportivos. Por ejemplo, diálogos sobre la entrega de entradas de parte de exdirigentes a la barra para la reventa. Cabe recordar que en el reciente allanamiento a Ceola por la balacera al frente del club, se encontraron varios talonarios de entradas para partidos de la época del ascenso.
Según se informó a UNO, en este marco, el fiscal Juan Francisco Ramírez Montrull pidió al juez de Transición Pablo Zoff que se imponga la restricción a los acusados para asistir al estadio Grella los días de los partidos. Pero todavía el magistrado no ha respondido el pedido.
Asimismo, el fiscal insistió con una solicitud que ya había realizado en julio, y que no había tenido lugar, respecto de la citación a indagatoria a más implicados en esta causa. Además de los 12 imputados y procesados, se hablaba de que eran unos 30 en total los nombrados en la investigación y que habrían tenido algún rol en la organización, de la cual Barrientos era el jefe, que desde la cárcel habría ordenado distintas acciones delictivas.