La Policía de Entre Ríos es, desde hace unos años, la única referencia del Estado en la Villa 351 de la ciudad de Paraná. Lamentablemente la violencia y balaceras son lo que hace visible esta zona postergada de la capital entrerriana.
Arduo trabajo policial para pacificar la Villa 351 tras las balaceras
Desde el jueves, cuando un menor de 15 años resultó baleado de gravedad en la cabeza, la División Homicidios, el personal de la comisaría sexta y los grupos especiales lograron la detención de cinco personas, tres de ellas por la tentativa de homicidio y las otras por diversas agresiones con armas.
El barrio está dividido desde hace un par de años. Primero fueron los Godoy contra los Sotelo. Hubo un muerto. Ahora son los Godoy contra los Argarañaz. Hay un menor herido de gravedad que estuvo involucrado en un ataque criminal a balazos contra un Godoy. Lo que ocurre en la zona es conocido por todos. Además la injerencia de una mujer vinculada al narcotráfico en la zona es notoriamente visible.
Los detenidos por el ataque al adolescente son tres personas de apellido Godoy de 31,22 y 21 años. Todos están en el penal de Paraná. El fiscal Cristian Giunta está a cargo del caso.
En tanto que ayer se logró la detención de un joven de apellido Álvarez, de 22 años, que escapó del barrio tras atacar a balazos a una casa.
Según conoció UNO, el personal policial estaba trabajando en las inmediaciones del barrio cuando se escucharon al menos 10 detonaciones de arma de fuego contra una precaria casa en la que había personas mayores y niños en el interior. El destino o la suerte hizo que no haya heridos ni muertos, pero sí muchísima tensión en el barrio. La gente salió a la calle a ver qué pasaba cuando el personal policial comenzó la búsqueda de Álvarez, que fue detenido y trasladado a la Alcaidía de Tribunales. En las próximas horas será acusado por el fiscal Cristian Guinta.
El barrio está sensible. Notoriamente la gente tiene miedo y espera que el Poder Judicial actúe. Muchas veces sucede que a las personas involucradas en incidentes armados la Policía la detiene y se les dicta solo una restricción que obviamente no cumple.
Varios vecinos se comunicaron con UNO para agradecer la labor de la Policía y reclamar que una vez que la situación se calme necesitarían que el Estado provincial y municipal se hagan presentes, pero con otras instituciones y obras para mejorar la calidad de vida de un lugar que fue creciendo sin planificación. Lo ocurrido con los bomberos, que fueron atacados cuando iban a apagar un incendio en una casa que aparentemente funcionaba de aguantadero, golpeó mucho a los vecinos honestos que no pueden vivir tranquilos.