Muchas personas dicen haber visto a Edilberto Florentino Schvind en distintos lugares de Nogoyá en las últimas semanas, pero ninguno de los comentarios pudo ser corroborado en la investigación. Lo único certero hasta el momento es que el hombre de 65 años salió de su casa con lo puesto y no regresó más. La búsqueda se ha extendido por todos los medios en la zona urbana, suburbana y rural, pero hasta ahora no se encontraron rastros que permitan saber dónde está Florentino. El desconcierto crece cada día que pasa, así como la angustia en su familia.
A casi un mes del último contacto, continúa la búsqueda de Schvind
Por José Amado
El 17 de mayo fue el último contacto que Mabel Schvind tuvo con su padre, por teléfono, y lo notó deprimido. Por esos días también fue la última vez que el hermano de Florentino lo vio en su casa. Luego pasaron los días sin novedades suyas, pero como era un hombre bastante reservado, a nadie le llamó la atención. A fines de ese mes, cuando su hermano no lograba ubicarlo por ningún lado, hizo la denuncia policial, el 30 de mayo. Desde entonces la búsqueda a cargo de la jefatura local y el fiscal Rodrigo Molina, se extendió por toda la zona, hasta ahora sin haber hallado un indicio del destino del jubilado.
Cuando se decidió ingresar a la vivienda de calle Gobernador Contín 1132, ubicada a un par de cuadras de la plaza principal de la ciudad, notaron inicialmente que la puerta estaba debidamente cerrada con llave. En el interior no había ningún indicio de una situación violenta, y encontraron elementos de Schvind: el celular, documentación personal y el vehículo estacionado en el garage.
Tras dos semanas de efectuar tareas de investigación y búsqueda, el jefe de la Policía Departamental Nogoyá, Javier Oertlin, dialogó con UNO para dar un panorama del caso: “Lo hemos buscado toda la semana en la zona suburbana y entrevistamos a las personas que les pareció ver al hombre en algunos puntos, pero sin nada certero, no hemos podido dar con el paradero, y tampoco a través de los familiares no hay nada puntual que nos indique que el hombre se fue o que está en otro lugar. Hemos hablado con todos los vínculos que conocemos y que conocen los allegados más directos, no son muchos porque era un hombre muy cerrado, no lo han visto desde aquella oportunidad. Y se efectuaron otras investigaciones, con oficios de Fiscalía se pudo saber que no registró movimientos bancarios”, explicó.
Además, contó que “se verificó con el hermano y un sobrino en su finca familiar de nacimiento, en la localidad de 20 de Septiembre, (ubicada entre Nogoyá y Lucas González), donde la familia tenía un campo. También en los lugares donde iba a pescar, no era de ir mucho pero muy de vez en cuando iba”, dijo. En ninguno de esos lugares se hallaron rastros de Schvind.
“Seguimos instando a través de los medios que cualquier persona que sepa o tenga un dato que pueda aportarlo, bienvenido para proseguir la búsqueda. Mientras tanto se continúa con los rastrillajes en montes, en cursos de agua, en casas abandonadas de la zona suburbana”, agregó Oertlin, quien detalló a su vez que “se enviaron circulares a otras jefaturas departamentales y a través de la División Compol al resto del país”, con la foto y datos del hombre buscado.
Cámaras, testigos, vínculos
Respecto de las cámaras de seguridad que puedan haber registrado el paso de Schvind por algún lado, se encontraron pocas y sin datos contundentes. Las que hallaron los investigadores se verificaron y sólo en una se lo observó en la fecha aproximada al día que el hermano dijo haber pedido contacto con Florentino. En ese video se lo registró relativamente cerca de su casa, cuando aparentemente iba a una panadería a la que solía ir.
Desde que se difundió el pedido de localización de Schvind, muchas personas se han comunicado con la Policía y dijeron haberlo visto en distintos lugares, pero ningún dato resulta fehaciente. Es una situación que siempre sucede en casos similares, con la voluntad de quienes quieren colaborar. Por fuera del círculo de familiares y amigos, en Nogoyá lo conocen porque solía poner un puesto en el Paseo los Puentes, una zona donde los fines de semana asisten la familias para pasear. Allí Schvind instalaba un puesto de venta de pororó o sánguches. Además, el hecho de que (desde el inicio de la emergencia sanitaria) el hombre salía con barbijo pudo haber complicado su identificación en la vía pública, así como confundir en otros casos.
También se han investigado relaciones sentimentales que Schvind mantenía, pero con esas personas tampoco ha tenido contacto alguno desde al menos el momento en que perdió comunicación con sus familiares.
Dos días después de la denuncia del hermano, fue a colaborar con la búsqueda una perra de rastreo con su guía, de Concepción del Uruguay. El animal marcó el trayecto de Schvind desde su casa hasta una plaza ubicada a tres cuadras de la vivienda del hombre, donde se corta el rastro. Resulta que para los perros, los vestigios olfativos que dejan las personas se pierden por muchos factores, desde el paso del tiempo hasta climáticos, y más aún en un lugar como esa plaza, que es muy transitada.
Se está evaluando si llevan un perro de búsqueda de personas fallecidas, pero para ello se necesita determinar un área específica; en este caso no se sabe hacia dónde pudo haber ido Florentino.
“Lo seguimos buscando”, aseguró Oertlin, quien al indagar en las diferentes hipótesis no ha encontrado motivos por el cual sospechar de un tercero con quien Schvind tenga algún conflicto. “No le encuentro ni un problema, cobra una jubilación tirando a la mínima, la casa es pequeña, y no hay un móvil para decir acá hubo algo raro o un delito”, aseguró el comisario.
“Padecía depresión”
La hija de Schvind, Mabel, dialogó con UNO y contó cómo notó a su padre durante el último contacto que tuvo, así como expresó su deseo de que lo encuentren bien.
Sobre aquel llamado telefónico, que es el último que se registra en el celular del hombre, contó: “Mi último contacto con él fue el 17 de mayo. Estaba deprimido, padecía depresión”.
Aseguró que “es la primera vez que se ausenta,estaba viviendo solo”. Consultada sobre si tiene alguna sospecha de qué pudo haber sucedido, dijo: “Quiero creer que en algún lado está, y bien”.
En cuanto a la búsqueda, consideró que “debería intervenir Prefectura y buscar en ese arroyo donde dicen haberlo visto”.