No hay en la historia del fútbol una relación tan intensa entre un futbolista y su ciudad de acogida como la de Diego Maradona y Nápoles. En 1984, Pelusa llegó a esa ciudad para aliviar las deudas que había contraído como jugador de Barcelona y el 10 de mayo de 1987 lo llevó a otra dimensión: Napoli, el equipo pobre del sur de Italia, tocó la gloria con su magia y ganó el primer scudetto. Ayer, por primera vez, Lionel Messi llegó a la misma ciudad donde brilló Diego Maradona y la revolucionó. Reconoció el escenario del duelo de ida entre Napoli y Barcelona por los octavos de final de la Liga de Campeones de Europa y donde hace más de treinta años atrás se vio la mejor versión de Maradona. El partido, que no escapó al alerta por el brote de coronavirus en Italia, se jugará en el estadio San Paolo de Nápoles esta tarde, a partir de las 16.45 hora argentina, y será televisado por Espn2.
El Mesías juega en la tierra de D10s
Messi, junto con el resto de la delegación de Barcelona, arribó ayer a Italia y pasó por los controles en el aeropuerto de Nápoles. De ahí el equipo culé se trasladó al hotel donde fue recibido por un grupo de hinchas cuya atención se depositó exclusivamente en Messi. Es que los napolitanos palpitan el choque ante el Barsa con el recuerdo permanente de Maradona, el futbolista que entre 1984 y 1991 llevó a los “terroni” (término con el que los del norte despreciaban a los del sur) a rebelarse frente al poder económico de Milán o Turín de la mano de Maradona. Por eso Napoli ama a Diego. Es su ídolo eterno. Lo idolatran de tal manera que en esa ciudad, Diego tiene aún un “altar permanente”.
La inevitable comparación entre Messi y Maradona se reavivó por estas horas en la tierra donde el fútbol también se vive de manera intensa.
Messi, con su talento, sus récords, sus títulos, sus goles y sus gambetas, sigue poniendo en jaque el reinado de Maradona. Y lo hace en las mismas tierras donde Diego desembarcó en Europa, como Barcelona. Ahora, el ganador de 6 balones de oro se presentará por primera vez en las entrañas del imperio maradoniano: Nápoles y por la Champions League. Nada menos.
Las leyendas no pierden vigencia, sino que la renuevan y la potencian día tras día. Hoy, en el San Paolo lo harán otra vez.
Chelsea recibe al Bayern Munich
El otro partido de ida, por los octavos la Champions, lo protagonizarán Chelsea y Bayern Munich, en el estadio Stamford Bridge, en la ciudad de Londres. La jornada continuará mañana con los choques entre Real Madrid v. Manchester City y Lyon v.Juventus.