Ayer se conmemoró el Día Internacional del Juego Responsable para concientizar sobre los riesgos de la ludopatía, una adicción que afecta a aproximadamente entre el entre el 1% y el 3% de la población mundial.
Juego problemático: consultas vuelven a nivel de prepandemia
Por Luciana Actis
UNO/ Mateo Oviedo
Un relevamiento de la Universidad Di Tella dice que aproximadamente siete de cada 100 personas en la Argentina padecen dificultades con el juego
La ludopatía es una patología que desde 1992 es reconocida como una enfermedad por la Organización Mundial de la Salud; y quien la padece tiene un impulso irreprimible de jugar, a pesar de ser consciente de las consecuencias personales, sociales y económicas de esa conducta.
Por eso, cada 17 de febrero se busca hacer hincapié sobre los buenos hábitos de juego y prevenir su uso compulsivo o problemático. La fecha fue conmemorada por primera vez por la Asociación Europea de Apuestas y Juegos de Azar.
De acuerdo a un relevamiento de la Universidad Di Tella basado en el denominado Índice PGSI (año 2018) –utilizado con frecuencia en estudios internacionales– aproximadamente siete de cada 100 (6,7%) personas en la Argentina padecen dificultades con el juego. De ese total porcentual, el 1,5% es jugador compulsivo, mientras que el 5,2% problemático.
UNO se comunicó con la psicóloga Carolina Molina, jefa del Departamento de Juego Responsable del Iafas y le consultó sobre las estadísticas: “A nivel nacional, de la única encuesta que tengo conocimiento y de la cual también participé, es la que llevó a cabo ALEA (Asociación de Loterías Estatales de Argentina), que arrojó que el 0,5% de la población tendría un nivel patológico con el juego. Acá en Entre Ríos queremos replicar esta encuesta en los próximos dos meses para ver si los datos coinciden”.
Se estima que en la Argentina hay 19 millones de jugadores, pero no quiere decir que toda esa población sea adicta, señaló en una entrevista con Télam Alberto Álvarez, psiquiatra y miembro de la Asociación Psicoanalítica Argentina (APA). Entre las actividades que se identifican con esta práctica se enmarcan los juegos de azar, las apuestas e incluso los videojuegos. Pero el problema no radica específicamente en cuántas horas se destinan al juego, sino en observar que no se resientan todos los otros aspectos de la vida.
Con respecto a cuáles son los estándares para definir cuándo una persona tiene problemas con el juego, Molina señaló: “Tiene que ver con el caso a caso, pero en líneas generales, cuando una persona comienza a ver afectadas sus demás áreas de la vida, familiar, económica, amistades, el trabajo, ahí podemos hablar de un problema. Un juego saludable, por diversión, no tendría porqué afectar la vida de la persona. Cuando la persona comienza a mentirle a su pareja o familia, deja de frecuentar amistades, comienza a llegar tarde o a dormirse en el trabajo porque se queda jugando hasta la madrugada, es ahí cuando podemos hablar de un problema con el juego”.
El departamento de Juego Responsable del Iafas –conformado por profesionales de Salud Mental– se creó en 2007 y de él depende el programa Prevenjuego. “Estamos marcando mayor presencia en la comunidad y siempre nos abocamos a las cuestiones preventivas, dar información, orientación y asesoramiento. Y cada 17 de febrero, Día del Juego Responsable, repartimos folletería, hablamos con la gente para tratar de llegar a la comunidad”, explicó la entrevistada.
En este sentido, remarcó: “Si una persona tiene problemáticas con el juego y se acerca a nuestro departamento, la asesoramos. Además, contamos con la herramienta de la autoexclusión, a través de la cual una persona de manera voluntaria solicita que no se le permita la entrada a las salas de juegos de azar de la provincia de Entre Ríos, que es una manera de controlar su posible problemática con el juego”.
También los familiares asisten a consultar de qué se trata el programa, a recibir orientación, ya sea de manera personal o por otros canales, como las redes, la línea telefónica o por Whatsapp, que es la vía de comunicación más frecuente. “En algunas ocasiones podemos intervenir, y en otras podemos solamente orientar qué se puede hacer en cada caso”, comentó Molina.
Consultada sobre la cantidad de consultas mensuales que reciben, indicó: “En la pre pandemia, entre 2017 y 2019, teníamos un promedio de 12 llamados por mes al 0800; y en Whatsapp teníamos un intercambio mensual de 2.000 mensajes, lo cual no significa que sean 2.000 personas, ya que con un usuario podemos tener quizás un intercambio de 50 mensajes o más, por ejemplo. Cuando comenzó la pandemia eso cayó, ya que cerraron las salas de juego y las agencias de tómbola. Ahora estamos volviendo, más o menos, a los números de consultas que teníamos previo a la pandemia. Y en febrero, que es el mes donde más hacemos hincapié en el juego responsable, el Whatsapp explotó de consultas”.
El Departamento Juego Responsable funciona en calle 25 de Mayo 265 - Planta Alta. Para comunicarse con el mismo, se pueden utilizar las siguientes vías: línea gratuita 0800-888-2202, teléfono fijo (0343) 4209570, por Whatsapp al 3434055252 o al correo electrónico [email protected].