"Los ancianos viven demasiado y es un riesgo para la economía global, hay que hacer algo ya", había dicho a mediados del año pasado la titular del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde. ¿Qué tendrá pensado para los adultos mayores doña Lagarde? Seguro que nada bueno, porque nada que venga de ese organismo de crédito es beneficioso para un pueblo.
Los jubilados están en la mira
29 de octubre 2018 · 23:01hs
El FMI quiere asegurarse que Argentina le devuelva la plata que le presta. El órgano no quiere más sobresaltos. Ya tuvo mucho con el despilfarro de dólares que hizo el extitular del Banco Central de la República Argentina (BCRA) Luis Caputo, quien se cree que montó un presunto esquema fraudulento que permitió la fuga de más de 15.000 millones de dólares de reservas que benefició a fondos especulativos. Si bien parece que lo que hizo Toto no es corrupción, hay muchos que opinan lo contrario. El denominado Messi de las finanzas hasta ahora no pasó por Comodoro Py para aclarar su situación. Muchos piensan que su amistad con el presidente Mauricio Macri lo está manteniendo alejado del Poder Judicial.
La mayoría de los jubilados están mal, la crisis galopante los está destruyendo. Muchos ni siquiera llegan a vivir 15 días con los haberes que perciben mensualmente. La situación es angustiante, pero lo que está por venir es peor, según lo que se puede leer de la carta de intención del FMI, que acá algunos llaman sugerencias cuando en realidad son imposiciones.
Durante el gobierno anterior a los jubilados les molestaba por ejemplo que se financien planes sociales con los fondos del Administración Nacional de Seguridad Social (Anses), pero hoy no dicen nada de que Cambiemos pretenda rifar y vender sin posibilidad de recuperación el Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS). Es más, el gran objetivo de Macri es volver a las AFJP. Nadie lo dice abiertamente, pero es una de las grandes apuestas de Nación.
Según la carta de intención que firmó con el Fondo Monetario, el Gobierno se comprometió a evaluar en 2019 una reforma que pone fin a las jubilaciones por moratorias, que sube la edad jubilatoria, entre otras cuestiones dañinas para todos. Lo que busca el FMI es asegurarse que le paguemos el dinero que le pedimos.
Desde Macri para abajo todos los funcionarios de Cambiemos tratan de hacerle creer al pueblo que lo mejor que nos puede pasar es acordar con el FMI. El ministro de Producción y Trabajo Dante Sica anda diciendo en Europa que "el rescate del FMI evitó que la crisis argentina fuera mucho peor". También anda promocionado una reforma laboral que nos quita derechos. Todo lo que viene a futuro es perjudicial para los trabajadores porque si bien muchos no se alertan en la actualidad por los cambios en las jubilaciones, en algún momento ocuparemos ese lugar.
Lamentablemente los medios hegemónicos ponen siempre su granito de arena y obtienen cada vez mejores resultados cuando de manipulación se trata. Se acaba de aprobar un Presupuesto que saquea aún más a los argentinos, pero la mayoría de esos votantes están preocupados por los desmanes que sucedieron en la plaza frente al Congreso. Las cámaras estuvieron ahí desde un primer momento como cuando se votó el saqueo a los jubilados que ahora, según Macri, ganan más que antes.
La manipulación mediática hace que la gente se preocupe por los policías y las paredes rotas y no por el saqueo que se acaba de votar. Es como sucede con los docentes. Los gobiernos se ocupan de culpar a los maestros por no dar clases cuando la responsabilidad es de ellos, los funcionarios. Los padres de los estudiantes se encargan de cuestionar, y es entendible a los docentes, pero no dicen nada de los millones que se robaron con contratos truchos, porque tranquilamente ahí hay dinero que hubiese podido ir a la educación. Si bien no es mucho, hubiera servido para mejorar los magros ingresos de los trabajadores de la educación. Cuando hay una marcha se destaca que hubo caos en el tránsito. Pero cuando la marcha le interesó a los grandes medios resaltan la participación popular y democrática. Ojalá que el pueblo no baje los brazos y siga en la calle incomodando al poder.