El nuevo milenio encontró a San Benito gobernado por Oscar Dionisio Acosta, un intendente de modos particulares que supo transitar la crisis de 2001 canjeando los ladrillos que por entonces producía la Junta de Fomento por diversos insumos municipales. Sin embargo, esa visión candorosa de aquella gestión justicialista no es lo que más se recuerda en Tribunales, Acostita sumará el 25 de agosto su segunda condena firme.
Exintendente de San Benito sería condenado en un juicio abreviado
El proceso a Oscar Acosta se inició en 2005. Es la segunda condena, y ya cumplió la pena de la anterior
17 de agosto 2017 · 09:02hs
Esto será así siempre y cuando la sala conformada por Elisa Zilli, Ricardo Bonazzola y Alejandro Grippo acepte la propuesta de juicio abreviado presentada ayer por la Fiscal de Coordinación Matilde Federik; el defensor Acosta, Iván Vernengo; y los defensores de los otros imputados.
Sin embargo, por la lentitud de la Justicia, no irá a prisión; dado que la primera condena ya concluyó y no puede sumarse a la pena de prisión condicional que correspondería en caso de prosperar el acuerdo.
El primer hecho es que Acosta -junto al contador municipal, Víctor Pedro Fedonmzuk, y al secretario de Hacienda, Carlos Aníbal Ríos- sustrajo del municipio 11.799,92 pesos simulando la realización de una licitación privada con el objeto de adquirir 40 luminarias completas (columna, lámpara, fotocélula de acuerdo a normas Iram) convocando a tres firmas: Arco Iris SRL, Electro Pul SRL y Digemat SA.
Con ese procedimiento se libró una orden de compra el 20 de junio de 2003 pero las farolas no aparecieron, porque la licitación en realidad no existió.
Otro hecho por el que fue condenado es la utilización de facturas adulteradas con el objeto de emitir órdenes de compra a nombre del municipio por sumas superiores a operaciones de compra realmente efectuadas con diferentes proveedores durante 2003, sustrayendo de esta forma del ámbito de la administración municipal la suma de 1.260 pesos. Fue adulterando facturas de Cotillón Zucu, Leandro E. Russ y Top Copier.
El tercer hecho corresponde a haber sustraído del ámbito municipal la suma de 12.650,66 pesos simulando la compra de materiales de electricidad a empresas inexistentes durante 2002 y 2003. Las empresas inexistentes son Electro Pul SRL, Digemat SA y Verde Materiales.
También se encontró probada la sustracción de 3.744,20 pesos simulando la compra de materiales de construcción a la firma Enedín Martínez, pero no se acreditó el ingreso de esos materiales al municipio.
Por estas razones, la Justicia consideró probado el peculado y el uso de documento adulterado en concurso ideal y en forma reiterada.
La valoración de la pena
Para quien fuera titular de la Junta de Fomento entre 1999 y 2003 se propondrá una condena de tres años de prisión condicional en el marco de un juicio abreviado, ya que el hombre reconoció su participación en los hechos, que la Justicia considera absolutamente probados. También la inhabilitación absoluta perpetua, y la realización de tareas comunitarias.
La Fiscal de Coordinación y el defensor técnico, al realizar la presentación conjunta de Juicio Abreviado, sostuvieron también que debe tenerse en cuenta a favor del imputado el "prolongado curso del presente proceso (iniciado en 2005) y, asimismo, que el procedimiento de juicio abreviado presupone que el imputado acepte y reconozca su culpabilidad por el hecho atribuido...".
Igualmente se consideró la condena anterior que tenía Acosta, a tres años de prisión condicional, aplicada el 1º de octubre de 2012. La pena de tres años de prisión condicional e inhabilitación por el doble de la pena fue aplicada al encontrárselo a él y a Ríos culpables de los delitos de Falsificación de documento público y privado en concurso con abuso de poder agravado.
"Ahora se consideró que, pese a tratarse de unificación de la condena, el monto de pena a imponer no puede considerar la de la condena anterior pues se halla extinguida".
Cuánta plata era eso
Los montos señalados en esta nota pueden parecer menores, dado el paso del tiempo. No resulta sencillo recordar el valor del dinero en 2003, pero sí vale para comparar, pueden recordarse algunos precios.
Por ejemplo, el 1 de junio de 2003, el kilo de asado de novillo costaba 3,99 pesos en la cadena Coto en la Ciudad de Buenos Aires. El medio kilo de yerba La Tranquera valía 99 centavos. Y un desodorante Rexona (envase de 131 gramos) costaba 3,75 pesos. La famosa Coca Cola, indudablemente un producto de referencia, de 2,25 litros costaba 2,49 pesos. El aceite de girasol marca Cañuelas de litro costaba 2,25 pesos y el café Dolca Suave de 200 gramos salía 5,99 pesos.