El lazo de unión que se crea entre un humano y su mascota es asombroso, y cuando esa relación la forman un niño y un perro, la fuerza de la misma es mayor. Cuando uno de los dos falta, el sentimiento de pena y vacío para quien queda con vida es desgarrador. Es lo que nunca debería vivir un pequeño, y lo que justamente le sucedió a Luke.
Un niño le escribió una carta a su perro muerto y recibió una sorprendente respuesta
Luke Westbrook y su madre Mary perdieron a su mascota, un perro de la raza beagle hace un par de meses. Desde entonces la madre del niño de 3 años le ayudaba a escribir, carta tras carta, a Moe (el perrito) con dirección al cielo de los perros. La carta iba dirigida a Moe Westbrook, El cielo de los perritos, Nube Nº 1. El pequeño esperaba y esperaba respuesta cada semana por parte de su querida mascota.
La madre introducía cada vez la carta del niño en el buzón para que el cartero la recogiera, pero cada noche la retiraba de allí para que no llegara a la oficina. Sin embargo, una noche a Mary se le olvidó retirarla, y a la mañana siguiente ya no estaba, el cartero había retirado toda la correspondencia. La sorpresa fue cuando un día llegó una carta cuya única inscripción era: "De Moe". En su interior se podía leer algo conmovedor que alguien de la oficina de correos tuvo en consideración escribir al pequeño Luke: "Estoy en el cielo de los perritos. Juego todo el día, soy feliz. Gracias por ser mi amigo. Te quiero Luke".