Pocas horas antes de emprender un viaje oficial a Dubai, el gobernador Gustavo Bordet anunció que el juez concordiense Miguel Ángel Giorgio -con 28 años de experiencia judicial- será propuesto para ocupar el cargo vacante de vocal del Superior Tribunal de Justicia tras la renuncia de Carlos Chiara Díaz.
Los porqué de la propuesta de Miguel Giorgio para el STJ
La trama del juicio político al exvocal del Superior Tribunal de Justicia terminó condicionando la forma de designación de quien será seguramente su reemplazante, un magistrado de perfil técnico que llega con el aval de Cambiemos
22 de febrero 2017 · 07:55hs
Foto UNO/Juan Manuel Hernández
La elección de Bordet parece obedecer, en principio, a la decisión de ubicar en la conducción de la Justicia provincial a un hombre de carrera judicial y bajo perfil político partidario, lo que parece adecuado además para evitar una disputa entre sectores políticos durante un año electoral. Eso puede ser interpretado de esta manera, aun cuando era sabido que la idea inicial del gobernador era reducir el número de miembros del máximo Tribunal como un gesto inicial de una reforma judicial en la provincia.
Contra esta idea chocaba un razonamiento político elemental. Si Bordet reducía -vía reforma de la ley orgánica del Poder Judicial- a siete o a cinco los integrantes el Superior Tribunal (actualmente son nueve), el próximo gobernador que se sentara en el sillón de Urquiza estaría habilitado para nombrar dos o cuatro integrantes de ese cuerpo, con solo volver a reformar la orgánica del Poder Judicial. Igualmente, el actual mandatario está convencido de la necesidad de avanzar en una reforma judicial que acerque a ese poder a la gente y simplifique sus trámites.
La historia
¿Por qué entonces, Bordet decidió postular a Giorgio, quien requerirá del acuerdo del Senado para ser designado? Esta nota intenta describir cómo la oposición legislativa en la provincia terminó imponiendo el nombre del reemplazante de Chiara Díaz, quien, como se dijo muchas veces, renunció ante la inminencia de su destitución. Este periodista ya publicó sobre el monitoreo permanente del caso que realizaba el máximo exponente de Cambiemos en la provincia, el ministro Rogelio Frigerio, quien terminó siendo determinante en la elección del nombre del juez propuesto.
El día que este diario anticipó que el justicialismo entrerriano quería someter a Chiara Díaz al juicio político, el 15 de noviembre, la idea parecía descabellada si se consideraba que tres meses antes lo había salvado del mismo peligro. Ya se ha dicho que nunca Chiara Díaz fue un juez antiperonista en sus fallos; pero mantenía claramente un enfrentamiento con la presidenta del Superior, Claudia Mizawak; y por supuesto, cometió durante años las irregularidades que quedaron demostradas en el proceso.
El oficialismo avanzó entonces con el enjuiciamiento, pero el Plan A cambió abruptamente cuando, sobre dichos de Chiara Díaz, abogados allegados a Cambiemos pidieron el juicio político a Claudia Mizawak.
En esa circunstancia, se acordó entre el oficialismo legislativo (peronismo) y la oposición (Cambiemos) avanzar con los dos juicios, con la alta posibilidad de que Chiara Díaz terminara siendo destituido; y Mizawak absuelta. La idea era que finalmente si el justicialismo consideraba que no había elementos para destituir a Mizawak, asumiera el costo político de votarlo en el recinto del Senado.
Sin embargo, cuando la Comisión de Juicio Político rechazó enjuiciar a la presidenta del STJ , los dirigentes de Cambiemos entendieron que el acuerdo no se había cumplido y amenazaron con no dar quórum en el Senado (constituido en Corte de Justicia) lo que hacía peligrar el juicio a Chiara Díaz, y podía determinar finalmente que se mantuviera en el cargo, si transcurría el plazo inexorable para dictar sentencia.
En ese contexto, el bloque de senadores de Cambiemos mostró un poco más sus fisuras, ya que no todos los legisladores opositores estaban de acuerdo con negar el quórum y salvar así a Chiara Díaz. Allí entró a terciar el hombre de mayor confianza de Frigerio en la provincia, el diputado Martín Anguiano, con quien el oficialismo legislativo acordó que los senadores den el quórum para terminar el proceso y que Cambiemos tendría la posibilidad de designar al reemplazante de Chiara Díaz. La decisión, por lo que se sabe, se adoptó en ámbitos legislativos del oficialismo, no del Ejecutivo.
Así las cosas, ante la noticia del acuerdo que significaba su casi segura destitución, Chiara Díaz presentó su renuncia el martes 7 de febrero. Se dice incluso que la nota en la que se prometía la renuncia del juez, que fuera presentada ante el Senado el 6 de febrero por el abogado Guillermo Brunner, era parte del acuerdo con los diputados del PJ. Se pensaba darle una semana de suspensión al proceso (como sugirió el jefe del bloque de senadores opositores Raymundo Kisser) para cerrar la discusión sobre el reemplazante; pero alguien olvidó advertir de esto a los senadores oficialistas. A ese malentendido obedeció la situación del lunes 6 en la cual Kisser amagó con irse de la sesión y dejar sin quórum a la Corte de Justicia pero debió retroceder porque su bloque no lo acompañó en la postura.
En el medio se había conocido también la posición del Procurador General Jorge García, quien entendía que si los senadores opositores no daban quórum incurrían en abuso de autoridad. Eso molestó a los senadores de Cambiemos, a Kisser en particular, ya que entendían que la discusión era política, no legal.
Al día siguiente Chiara Díaz renunció y despejó el camino.
Las propuestas
Una comisión de tres legisladores notables de Cambiemos (Kisser, Anguiano y el diputado Esteban Vittor) debían designar una terna de nombres para que el gobernador tuviera a su disposición. Su tarea no era sencilla pues en ese sector político había dos posturas. Algunos (como Kisser y Vittor) se inclinaban por un juez de trayectoria; mientras otros opinaban a favor de que fuera alguien "de afuera" del Poder Judicial y con antecedentes en la actividad privada.
Según se supo, esa terna tuvo variaciones. Inicialmente se mencionó al exconvencional constituyente y actual decano de la Facultad Teresa de Ávila de la Universidad Católica Argentina, Martín Acevedo Miño; al diputado nacional radical Jorge D'Agostino; y el reconocido penalista paranaense Julio Federik. Sin embargo, finalmente la propuesta del Consejo de la Magistratura Frigeriano fue Hugo Perotti, Giorgio y Ana Clara Pauletti(hija del exvicegobernador radical Edelmiro Pauletti).
El caso Federik
Sin desmerecer a los otros postulantes, el nombre de Federik había generado una serie de apoyos importantes en el gobierno nacional (incluso el ministro de Justicia, Germán Garavano, dejó trascender su acuerdo). El penalista de dilatada trayectoria,reconocida idoneidad para el cargo, exconvencional constituyente, autor del Código Procesal Penal, era una figura que calzaba perfectamente pero, según se dice, no terminaba de convencer a los radicales. En ese juego de presiones ocurrió que finalmente fue reemplazado en la propuesta por Pauletti, una civilista reconocida, pero claramente de menor trayectoria judicial.
Incluso se dice que Frigerio había aceptado el nombre de Federik, quien además contaba con el apoyo del senador nacional Alfredo De Ángeli. Allegados a Federik sostenían en las últimas horas que hubo una traición a un inicial compromiso en ese sentido.
La decisión
Con los tres nombres en la mano (Perotti, Giorgio y Pauletti) y respetuoso del compromiso político, Bordet optó por zanjar rápidamente la cuestión y anunció ayer que propondrá a Giorgio para el cargo. Giorgio tiene una amplia trayectoria, y quienes lo conocen sostienen que sin tener una identificación partidaria (como sí la tienen algunos vocales) siempre fue allegado al radicalismo. También se dice que tiene una relación personal muy cercana con el actual vocal Daniel Carubia. De los tres es además a quien Bordet más conoce.
No pretende esta nota menoscabar las condiciones de los magistrados aquí mencionados, ya que incluso su mención es un reconocimiento de sus capacidades; pero está claro que la integración del Superior Tribunal de Justicia responde a criterios más políticos que técnicos, y la ejecución de esos criterios, se desarrolla con las reglas de la política.
La reducción
Como se señaló al principio de esta nota, la reducción de los miembros del STJ era la idea inicial del gobernador, para marcar un hito a partir del cual desarrollar una reforma judicial en la Provincia. Habría que entender que esa posibilidad no está caída. Incluso ayer, al tomar contacto con periodistas se refirió al tema: "(La reforma judicial) debe ser fruto de algo pensado, razonado, no algo improvisado", dijo.
En ese sentido Giorgio sostuvo: "Hay que estar siempre abierto al diálogo en las reuniones que corresponda. Yo tengo la mejor disposición de trabajar y el trabajo se logra de esa forma, consensuando, y vuelvo a insistir, en lo que no se pueda consensuar manifestaré mi postura como lo he hecho siempre".
Rumores y chistes
Algunos dirigentes peronistas sin responsabilidad de gobierno marcaban ayer algunas rarezas del proceso. Señalaban por ejemplo que la denuncia inicial contra Chiara Díaz fue presentada por un grupo que reúne a dirigentes que tuvieron problemas serios con la Justicia por casos de corrupción (Domingo Daniel Rossi y Augusto Alasino, por ejemplo) y que "terminaron cargándose a un juez que había sido siempre funcional al peronismo". También hubo menciones a los que entendían que a Chiara Díaz lo querían sacar para favorecer al exgobernador Sergio Urribarri en sus causas judiciales. "Los radicales nos entretuvieron con eso, pero lo cierto es que si Urribarri llega a la Sala Penal es porque ya está frito. A la manija del caso la tienen jueces de instancias inferiores".
Por último, en tono de broma, algunos de estos dirigentes peronistas proponían rendirle un homenaje al exgobernador Sergio Montiel recordando -con sorna- su actitud frente al recordado intento de juicio político en abril de 2002. "Hay que rendirle un homenaje a Montiel, que frenó el juicio comprándolo al Laucha Del Real y le pagó con federales. Nosotros, en cambio, para sacarlo a Chiara Díaz con justa causa tuvimos que entregarle el lugar a Frigerio".