Desde el barrio Paraná XVI regaron con cocaína varias zonas de la capital entrerriana y Diamante. Mientras ellos obtenían pingües ganancias que le permitieron comprar impunidad durante varios años, muchos padres padecían la degradación de sus hijos por la droga. Ayer los fiscales federales José Candioti y Leandro Ardoy realizaron una evaluación de todas las pruebas que se obtuvieron desde marzo de 2015 hasta diciembre de ese mismo año para pedir condena de prisión efectiva para los 15 integrantes de la banda narco liderada por Nicolás Castrogiovanni.
Pidieron condena para la banda del "Gordo Nico" Castrogiovanni
El líder de la organización narco junto a colaboradores, distribuidores y vendedores fueron acusados por el fiscal federal
24 de octubre 2017 · 23:30hs
Esta organización delictiva desarticulada por la Policía Federal contaba entre sus 15 integrantes con un policía entrerriano en actividad, otro retirado y dos agentes del Servicio Penitenciario.
Durante casi seis horas estuvieron alegando los fiscales federales que explicaron al tribunal presidido por Roberto López Arango cuáles eran los roles de cada uno de los integrantes de la organización delictiva que desde el oeste de la ciudad de Paraná distribuía cocaína. De esta manera, los fiscales reclamaron condenas que van desde los siete años y seis meses, hasta los cinco años, todos de cumplimiento efectivo. Además pidieron que se apliquen multas económicas a los integrantes de la organización.
Escuchas vitales
Candioti comenzó el extenso alegato relatando lo sucedido con la apertura de la investigación judicial ordenada por el juez federal en noviembre de 2015. Detalló las 60 escuchas que fueron difundidas ante el tribunal Oral Criminal Federal en donde quedó más que claro cómo era el funcionamiento de la banda liderada por Castrogiovanni y cómo el resto de los roles se iban complementando.
A las escuchas le sumaron los procedimientos que realizó la Policía Federal, localizando importantes sumas de dinero, armas de fuego y hasta dos kilos de cocaína. Solo faltaba armar el rompecabezas.
El fiscal alertó que los líderes prácticamente "no tocaban la droga" pero sí dirigían el negocio. En esta investigación encontraron al proveedor general de la organización; a la mano derecha del líder; los encargados de la venta en sus distintos rubros de cantidad y hasta los almacenadores.
Hubo cuestionamientos especiales para los integrantes de las fuerzas de seguridad: dos penitenciarios y un policía que formaban parte de la organización. Su función en la sociedad era atacar al delito, y en esta banda tenían roles fundamentales para el funcionamiento.
Cerca de las 15, Candioti pronunció las palabras que fueron tomadas como la cercanía a la finalización de su alegato. "Formalmente solicito acusación contra los 15 integrantes de la banda, quienes por sus distintos roles y funciones tendrán diferencias en los reclamos de penas".
Roles y condenas
De esta manera, los pedidos de condena fueron los siguientes: agrupó en dos partes a los actores de las bandas, en los responsables de las coautorías en la comercialización de estupefacientes agravada por la existencia de tres o más personas; y los considerados como coautores secundarios. Obviamente que Nicolás Ramiro Castrogiovanni y Ariel Pucheta recibieron las penas más altas de siete años y seis meses de cárcel. El primero por jefe y el segundo por proveedor. En tanto que Iván Castrogiovanni obtuvo una pena de siete años, al igual que Víctor David Villaverde, Fernando Manuel Gómez, Rodrigo Javier Medina.
Además los fiscales reclamaron multas de entre los 20.000 hasta 10.000 pesos. El último planteo de los alegatos fue el decomiso de los más de 100.000 pesos en efectivo y un Peugeot 206 de Castrogiovanni, que fueron secuestrados en los allanamientos. El jueves será el turno de los alegatos de los defensores, y en caso de ser necesario las réplicas de los fiscales. El tribunal hizo saber que el adelanto de la sentencia se efectuará la semana que viene.
Salón pequeño
En un salón que va quedando incómodo para juicios contra organizaciones delictivas el calor se hizo sentir. Este fue el primer juicio numeroso de al menos cinco investigaciones que en los últimos dos años desbarataron la venta organizada de estupefacientes entre muchas personas con distintos roles.
A futuro se espera que se tome alguna medida ya que la capacidad del salón de audiencias es pequeña y las organizaciones narcos son cada vez más grandes.