Hugo Espinosa, dirigente de la agrupación 6 de Agosto del Sindicato de Camioneros, denunció que sufrió una golpiza durante la asamblea realizada el sábado a la tarde en el camping de la entidad en Paraná. Responsabilizó de la situación al secretario general y diputado provincial, Antonio Alizegui.
Denunció que fue golpeado en la asamblea del gremio de Camioneros
Espinosa, de 61 años, dijo a UNO que recibió golpes, patadas y empujones luego de intercambiar opiniones con miembros de la comisión directiva sobre lo sucedido durante la asamblea y que también fueron víctimas dos de sus compañeros de la agrupación oriundos de Concordia, Daniel Lasaga y Santiago Gonzalez. Manifestó que hizo la denuncia en la Comisaría 14 y luego le realizaron un reconocimiento médico.
El plenario había sido convocado para aprobar memoria y balance. “Estaba convocado para las 17 pero empezó a las 19.30, luego de que hicieron ingresar gente que no pertenece al sindicato”, relató.
“Cuando se iba a votar, pidieron que se hiciera a libro cerrado. Yo me opuse pero no pude hacer nada. Éramos tres contra 500”, continuó.
El dirigente sostuvo que cuando se retiraba tuvo una discusión con miembros de la comisión directiva y fue entonces cuando comenzó a recibir los golpes: “Me agarraron de atrás, me llevaron afuera y me pegaron puñetes. Me rompieron los lentes, me pegaron en la espalda y patadas en los tobillos”.
Según dijo, “todos miraban pero nadie intervenía, ni Alizegui ni nadie”. Dejaron de golpearlo cuando el secretario gremial, Jorge Ávalos, lo sacó a la calle, indicó.
Pero allí no habría terminado todo, ya que señaló que recibió “amenazas de muerte” y le sacaron fotos a su auto. “Hago responsables a los miembros de la comisión por cualquier cosa que pueda pasarme a mí y a los muchachos de Concordia”, aseguró.
Espinosa contó que sus problemas con los dirigentes provinciales de la entidad comenzaron cuando en 2004 denunció fraude en las elecciones a las él que se había presentado como candidato. Antes había sido revisor de cuentas pero dejó el cargo al encontrar supuestas anomalías.