Hugo Altamirano es presidente de la comisión vecinal Antártida Argentina desde hace 8 años y en diálogo con UNO describió la realidad de los vecinos. "Los de mayor riesgo son once, pero es inevitable que se sigan sumando más afectados", dijo y agregó: "Desde 2016 realizamos como comisión trámites en la municipalidad de Paraná, pidiendo que estos vecinos sean relocalizados porque acá no se pueden quedar", explicó el consultado.
MIRÁ EL VIDEO >>>>>
El barro nauseabundo, los perros enfermos revolviendo todo, caballos atados en el patio donde a centímetros una vecina tiende la ropa al sol que por fin se digno a salir, los cerdos casi domésticos y la basura, tanta y tan putrefacta, repartida por todos lados. Un señor mayor nos da lugar con su carro, en algo que parece ser un camino de salida. Desde ahí arriba, en calle Segundo Sombra al final, entre Barranquitas y Antártida Argentina puede verse como trabajan los camiones en el volcadero municipal.
Junto a Altamirano y algunos de los vecinos afectados recorrimos el lugar. Margarita, una mujer de 38 años, mamá de cinco hijos, de los cuales uno de ellos fue operado del corazón hace seis meses, nos contó que le recomendaron que el pequeño viva en un ambiente sano. "Y también tengo el problema de que se va para todos lados, y se me puede caer en cualquier momento", explicó.