El fútbol argentino vivió el 18 de diciembre un hecho histórico con la obtención de la Copa del Mundo en Qatar 2022. La Albiceleste volvió a festejar un título que esperó durante 36 años, haciendo emocionar a todos los que aman este deporte. Prueba de ello fue el multitudinario recibimiento que se le dio a la Scaloneta, con cerca de 6 millones de personas en las calles adorando a Lionel Messi y compañía.
AFA: es el momento de honrar las tres estrellas
Por Mauro Meyer
Las tres estrellas sobre el escudo de la AFA.
Durante varios días, la gente se olvidó de los problemas que día a día debe sobrellevar y celebró con todo la obtención de la tercera estrella. Incluso todavía hoy se sigue recordando aquel épico partido ante Francia, el gran juego que el seleccionado tuvo durante 80 minutos, el gol de Lio en el suplementario, el empate de Mbappé y la tapada de Dibu Martínez a poco del final. Por lejos, fue la mejor final de todos los mundiales, al menos de los que yo recuerdo. La de México 86 puede haber sido similar, sobre todo porque el resultado final fue favorable para la Argentina. Pero no tuvo los condimentos que existieron en la definición que terminó con el penal de Gonzalo Montiel. Además, ver a Messi levantar la tan ansiada Copa del Mundo fue como una mochila pesada que el rosarino y todos los amantes del fútbol se sacaron de encima.
Antes de eso, hubo una apuesta fuerte por parte del presidente de la Asociación del Fútbol Argentino, Claudio Chiqui Tapia, que fue la designación de Lionel Scaloni como entrenador del combinado nacional. Una elección que puso a todos a debatir y en la cual la gran mayoría no estuvo de acuerdo. La verdad es que el mandamás de la AFA acertó con creces, aunque fue todo mérito del exvolante de Newell’s, Estudiantes y La Coruña, entre otros equipos. Es que el DT se rodeó de gente de su confianza, también con pasado en la Selección y que sabe cómo entrarle al jugador, sobre todo en un grupo con tantas estrellas.
Ahora bien, si miramos puertas adentro, resulta hasta irrisorio que el fútbol argentino haya logrando la Copa del Mundo teniendo un manejo casi payasesco de los torneos locales. Una Liga Profesional con 28 equipos y en la cual el año pasado se pensó en suprimir los descensos para llegar a 30. Incluso hubo un diputado nacional por Entre Ríos que presentó un proyecto para que esto suceda, como si no tuviera algo mejor que pensar en beneficio de los ciudadanos. Si seguimos mirando las otras categorías, nos encontramos con una Primera Nacional (la que está a punto de jugar Patronato) con 37 elencos, un Torneo Federal A que es interminable, al igual que el Regional Amateur. Y esta enorme participación de clubes tiene una sola finalidad: dejar a todos contentos y levantar la mano a favor de las ideas que surgen de la cabeza de Chiqui Tapia. Pero esto no es nuevo, ya que con Julio Grondona sucedía lo mismo.
La última gran genialidad fue la aprobar una amnistía general para las entidades de todas las categorías y los futbolistas que tenían que cumplir hasta tres fechas de sanción, tal como sucedió en la temporada pasada. En un comunicado a través de su página oficial, la Liga Profesional explicó: “Por una situación históricamente inédita, más del 70 por ciento de los clubes de Primera División del fútbol argentino le han pedido al presidente de la AFA que le eleve al Tribunal de Disciplina la implementación de una medida excepcional y única: que aquellos equipos que cuentan con jugadores con sanciones por cumplir en el próximo torneo 2023, estén habilitados para desempeñarse en sus respectivos clubes”.
Los mal pensados, que siempre existen, afirmaron que esto se aplicó para beneficiar a Boca, que en aquel partido por el Trofeo de Campeones ante Racing tuvo seis jugadores expulsados. Lo cierto es que desde todo punto de vista es un mamarracho, sea quien sea el equipo beneficiado. Pero, como dice el dicho, que le hace una mancha más al tigre. Desde aquel imborrable 18 de diciembre de 2022, el mundo entero mira lo que sucede en el fútbol campeón del mundo. Muchos se habrán llevado una sorpresa al enterarse de esta amnistía general. Prepárense, porque no será el único accionar polémico de la AFA. Una entidad que debería honrar las tres estrellar que ahora posan sobre su escudo.