En los últimos días, desde la Dirección Nacional de Migraciones de la República Argentina se deslizó la posibilidad de que Entre Ríos podría ser epicentro de una prueba piloto para la habilitación de pasos de fronteras terrestres.
Fronteras: aún no hay precisiones sobre su apertura
La titular del área, Florencia Carignano indicó: “Nos gustaría tener todas los pasos fronterizos abiertos, pero hay una realidad, vivimos una pandemia y hay que entender”. Al mismo tiempo anticipó que “con Uruguay se están proyectando algunas pruebas pilotos, como por ejemplo en ciudades limítrofes que tienen una vida en común. En estas fronteras se aplicarán primero las pruebas pilotos, como en la zona de Entre Ríos”. Igualmente, remarcó que eso solo será posible luego que “se avance en la vacunación y bajen los casos de manera sostenida”.
Cabe destacar que son numerosos los ciudadanos que viven en los dos márgenes del río Uruguay, que están a la espera de una respuesta positiva porque muchos de ellos trabajan en uno y otro lado. Inclusive, hay casos de personas que desde marzo de 2020 dejaron de ver a sus familias a raíz del cierre de las fronteras.
Al respecto, el coordinador del Centro de Frontera Concordia-Salto y coordinador de Centro de Frontero Mesopotamia Sur, Diego Labeque Drewanz sostuvo que “es una información que se lo debe estar manejando con equipos puntuales de la Dirección Nacional de Migraciones en Buenos Aires”. Y agregó en LT 15 Radio del Litoral: “Estuve haciendo averiguaciones a la Dirección Nacional de la cual dependo, que es la Dirección Nacional de Asuntos de Fronteras que también depende del Ministerio del Interior y me comentaron que todavía no tenían información puntual, precisa sobre esta planificación. Seguramente la debe estar planificando con sus equipos para presentarlo a quienes vienen coordinando estas cuestiones de fronteras, que son la ministra de salud de la Nación, Carlos Vizzotti; el ministro del Interior, Eduardo De Pedro; y el jefe de Gabinete de la Nación, Santiago Cafiero. Puntualmente no ha llegado ninguna información”.
En cuanto al rol que lleva adelante cada país en esta etapa de la pandemia y al momento de buscar una solución integral, el funcionario detalló: “Cada uno de los países en estas circunstancias ejerce su propia soberanía del acceso de personas al país. Es un poco complejo como se llevan adelante los movimientos migratorios. Un país puede permitir su ingreso de personas con determinados protocolos, pero si el otro país no está de acuerdo solamente podrían ingresar de un lado y del otro no. Ahí ejercería soberanía individual cada uno de los países”.
Labeque Drewanz indicó que hace unos meses “cuando el presidente Lacalle Pou de Uruguay hizo unas declaraciones manifestó que se tendrían que ir pensando procedimientos para que ingresen argentinos a su país, después no se llevó adelante esa situación porque tuvieron una ola de contagios con la cepa de Manaos, que le complicó todo de planificación de apertura de fronteras”. Al mismo tiempo aseveró que Argentina mantiene cerradas las fronteras terrestres para el flujo migratorio de personas “porque se fueron desarrollando otras cepas y como se viene con un plan de vacunación sostenido, puntual y esperanzador, que le da una perspectiva a poder planificar estas cuestiones. Pero en paralelo se han generado otras cepas, como la Delta generada en la India y se la espera en nuestro país, por lo que hay que ir frenándose”.
De esta manera, por el momento sigue siendo cuatro los ingresos permitidos al país, que son vía aérea a través del aeropuerto de Ezeiza, el de San Fernando, Aeroparque y vía fluvial por Buquebus en el puerto de Buenos Aires, donde el Ministerio de Salud de la Nación, montó un equipo de control para los ingresos con protocolos para acceder.
El coordinador del Centro de Frontero Mesopotamia Sur describió las nuevas exigencias estrictas que se mantienen para el ingreso al país. “El ingreso y egreso del país lo pueden ejercer todo ciudadano argentino que está fuera del país puede retornar al país, pero por los cuatro lugares permitidos. En cambio, todo ciudadano uruguayo que no es residente en Argentina, que quiera entrar al país en este momento no puede ingresar a la Argentina porque están cerradas las fronteras. En tanto que el uruguayo que tenga la residencia o es de nacionalidad argentina, sí lo puede hacer con un certificado Covid-19 con PCR negativo con una vigencia menor a las 48 horas al desembarque en Argentina, luego se le hace un test de antígenos al llegar al país, debe tener un lugar puntual donde se va a alojar durante siete días y al séptimo día debe volver a realizarse un test de PCR porque en caso de que sea positivo se debe identificar de qué cepa es. Si en el último test da negativo, la persona en la declaración jurada ya puede ingresar al país”, dijo.
Labeque Drewanz manifestó que en los últimos días mantuvo encuentros con dirigentes del Centro de Industria, Comercio y Servicio de Concordia, ya que necesitaban conocer cuáles son las perspectivas a corto y largo plazo, en función del flujo comercial que existe entre las dos nacionales. “Ellos me comentaban las razones económicas de la situación laboral de comerciantes tanto de Concordia, como del vecino país y me manifestaban su preocupación. Sabemos que esta situación ha golpeado muy duro esta situación pandémica, pero se deben planificar políticas muy fuertes en materia sanitaria, que también contemplen esta cuestión económica, pero que no pongan en riesgo la vida de los ciudadanos. Esa fue la prioridad que estableció el presidente de la Nación desde el año pasado”, finalizó.