En el barrio Lomas del Mirador II de la ciudad de Paraná hace tiempo que esperan soluciones para el sinfín de problemas que los aqueja, particularmente la seguridad y la cuestión habitacional, por los peligros edilicios derivados de la mala construcción y la posterior ocupación irregular de las viviendas. El miércoles asomó por estas calles de la zona este de la capital una respuesta, de la mano del intendente Sergio Varisco y la subsecretaria de Hábitat y Desarrollo Humano de la Nación, Marina Klemensiewicz. Sin embargo, la comitiva integrada por un “equipo de colaboradores”, tal como se informó en la gacetilla oficial, tuvo una compañía que sorprendió a los vecinos que observaban la caminata de los funcionarios. Se trataba de Francisco Pereyra, más conocido como Pancho La Vaca, quien junto a algunos de sus hijos fue noticia en los últimos años pero por hechos lamentables ocurridos en el barrio.
En el Lomas, Los Panchos quieren volver al ruedo
21 de septiembre 2016 · 17:42hs
Popularmente se ganaron el nombre de “Clan Los Panchos”, tal como los bautizaron algunos vecinos creativos. Entre los episodios que tanto habitantes del Lomas II como la comunidad educativa de la escuela del barrio prefieren olvidar, se encuentra el tiroteo e intento de toma de la comisaría 12º, y otros cuyas balas pasaron cerca de la institución educativa, que terminaron con maestras y chicos cuerpo a tierra en las aulas.
También estuvo la denuncia de un grupo de vecinas por las constantes agresiones y amenazas para que abandonaran sus viviendas, que habrían pretendido ocupar. Por estos hechos, aunque con mucha lentitud, la Justicia tomó cartas en el asunto. En mayo del año pasado, en el marco de la causa por estos hechos de violencia (caratulada Homicidio en grado de tentativa y daños a bienes del Estado, entre otros delitos), le impusieron 40 días de exclusión del barrio.
Pancho Pereyra era referenciado con el peronismo en el barrio, pero corriendo atrás del próximo ganador, en las elecciones del año pasado militó activamente para el varisquismo. Por eso algunos entendieron que la invitación a recorrer el Lomas el miércoles era un gesto acorde a su militancia electoral que podría derivar en otros favores. En esa instancia, se lo vio acompañando a los autoridades e indicándoles cuestiones relativas al barrio, cual guía turístico. Actualmente, el Pancho maneja una copa de leche en el barrio y quiere armar prácticas de fútbol para los gurises. Muchos temen que desde el estado se le vuelva a dar poder a un sujeto que tuvo a maltraer a muchas personas. E incluso muchos se preguntan por qué lo eligieron a él, si a esta altura “no mueve a nadie”.