Desde hace un tiempo el Gobierno nacional está intentando flexibilizar los trámites y minimizar las trabas a la hora de comprar en el exterior. Si bien la crisis de consumo pegó duro a la sociedad argentina, el "sueño" de comprar afuera y que llegue es posible. Sin embargo, todo el proceso no está exento de dificultades: desde papelerío difícil de completar, pasando por la burocracia del correo y llegando hasta los propios sitios para comprar, poder hacer un pedido y que llegue bien es una ciencia y un arte.
Así se puede comprar afuera sin pasar por la Aduana y con un ahorro del 50%
Existen dos grandes sistemas para pedidos. Uno es el llamado Puerta a Puerta, que depende del Correo. Según la última regulación publicada, esto comprende a las compras realizadas en el extranjero que no superen los U$S3.000 y que por su especie y cantidad no hagan presumir finalidad comercial.
La resolución establece que la cantidad y el monto de las compras exentas de impuesto será elevado, de un único envío anual de U$S25, a 12 envíos de U$S50 cada uno en el mismo período. Tampoco será necesario realizar el trámite a través de la página web de la AFIP, ni contar con Clave Fiscal nivel 3 para realizarlo.
Por otro lado, la cara “B” de los pedidos, el sistema de pequeños envíos y que se rige por el sistema Courier (es decir, empresas como DHL o FedEx) opera con hasta 3 unidades del mismo producto, hasta cinco compras por año, mercadería para uso personal y no comercial por hasta 50 kilos y un límite por compra de U$S1.000 en el importe final.
¿Qué conviene más?
La pregunta del millón, para el usuario, es finalmente qué conviene más al momento de comprar en el exterior.
A la hora de comprar por Puerta a Puerta, la cuenta es bastante sencilla: se tiene que considerar el costo de envío (que puede ascender hasta U$S90) más los impuestos (que suman 50% sobre el excedente de U$S50, o sea que un producto de U$S100 tiene un impuesto de U$S50).
El caso de los courier es distinto, como explicó el sitio de compras en el exterior Grabr. "Sin embargo con Grabr se evitan todos esos pagos extra y se negocia un valor de recompensa con el viajero y se abona una tasa por uso del servicio. Al existir para viajeros una franquicia actual en Argentina para ingresar productos por un valor de hasta U$S500, más un teléfono y una tablet o notebook libres de impuestos", afirmó Alvaro Pandelo, Marketing Manager para Argentina de Grabr.
Por caso, un producto que cuesta U$S479 en el mercado local se puede conseguir en en eBay o Amazon se encuentra por U$S250.
Este courier funciona trabajando con viajeros que adquieren los productos en el exterior y los traen al destino local. El viajero cobra una comisión por ese servicio.
La comisión del viajero suele ser del 10% al 25%. Para por ejemplo un iPhone XS de U$S1.186, la recompensa del viajero ronda los 90 dólares y el precio final con Grabr ronda los U$S1.364.
"Teniendo en cuenta que el precio de el mismo teléfono comprado por el puerta a puerta es de U$S1.800, que es el precio original más 50% de impuestos, más el precio del envío certificado, es una opción más costosa", explicaron desde la empresa.
Los costos que componen el precio final del courier son:
- Precio del producto
- Impuestos de USA, que es como el IVA en Argentina pero de diferentes valores dependiendo del Estado en el que se haga la compra (En el caso de que el producto esté en Estados Unidos)
- Tasa de envío internacional compuesta por: - Recompensa del viajero (entre 10% y 25%) - Comisión por uso del servicio de Grabr (7%)