Cuando un equipo realiza una gran campaña, lógicamente la misma se respalda en los números. El club Estudiantes cerró el sábado la primera rueda de la Primera División del Torneo Regional del Litoral de rugby de manera invicta. Jugó y ganó los nueve partidos que disputó, marcha puntero con 43 puntos sobre 45 posibles (95,6% de efectividad). Tiene un ataque letal, con 302 tantos a favor y una defensa que solamente permitió 115 tantos en contra. Logró apoyar 45 tries (promedio de 5 por partido) y solamente le convirtieron 12 (un poco más de 1 por encuentro). Estas estadísticas, alcanzadas en uno de los certámenes más competitivos del país, pusieron al CAE como el equipo sensación del momento. Claro que Pedro Raiteri, entrenador principal del equipo, entiende que para llegar a este gran presente hubo que transitar un largo camino.
Pedro Raiteri: "Este éxito no nos tiene que anestesiar"
UNO / Juan Ignacio Pereira
“A los chicos se les nota en el rostro que tienen una mentalidad ganadora”, dijo Pedro Raiteri.
“La gente habla de algo increíble, pero nosotros no creemos que sea así porque esto es fruto de un trabajo, no solamente de este año sino también del esfuerzo que hicieron los jugadores durante la pandemia. Eso lo recordamos siempre porque forjó el carácter de un plantel largo con muchos chicos, de diferentes camadas y diferentes responsabilidades. Eso formó en el plantel un espíritu ganador con muchas ambiciones, pero que también tiene los pies sobre la tierra porque esto recién empieza”, indicó en diálogo con La Radio de UNO (88.7).
Con los excelentes números cosechados hasta el momento, el referente del Albinegro señaló que están orgullosos “principalmente de nuestra defensa”. “Es a partir de ahí donde construimos los partidos, sin dejar de mencionar al ataque que es muy efectivo”, agregó.
El fin de semana, Estudiantes venció a Santa Fe RC, el único que cortó con la hegemonía rosarina en 2008. Raiteri aprovechó la oportunidad para hablar con algunos campeones de ese entonces: “Nos contaron de lo difícil que fue, de todo el proceso que tuvieron que soportar, de lo distinto que es una segunda rueda y luego las semifinales. Nosotros estamos contentos con lo que hicimos hasta ahora y esto nos trae mucha responsabilidad. No podemos permitir que este éxito nos anestesie. Es temporal y hay que vivirlo con alegría, pero nos tiene que invitar a ser más responsables, a renovar los compromisos. Nosotros como entrenadores tenemos que innovar, incorporar cosas al juego, mejorar los aspectos que somos débiles y profundizar en los que somos fuertes”.
Antes de comenzar el TRL y en una charla con UNO, Tomás Ferreyra (capitán del CAE) expresó sin pelos en la lengua que el objetivo planteado era salir campeones. Esa mentalidad ganadora fue resaltada por Raiteri.
“Estoy convencido que ese pensamiento se forjó durante su traspaso de juveniles y en la pandemia. Debemos ser el club que tiene el récord en entrenamientos por Zoom. Llegamos a hacer cuatro meses enteros y hasta tres o cuatro prácticas por semana. Ahí hubo un trabajo muy grande de los preparados físicos y de quienes colaboran con nosotros. Hay un equipo muy grande de gente detrás, como analistas de videos y asesores. También estamos trabajando de cómo manejar esta situación desde el punto de vista sicológico. Es cierto, a los chicos se les nota en el rostro que tienen una mentalidad ganadora, es un equipo que siempre busca ganar y siempre es a partir de la defensa. Los jugadores están disfrutando este momento”, sostuvo.
El éxito actual no marea al entrenador, que sabe que todavía falta mucho camino por recorrer.
“Estamos trabajando mucho, pero igual vemos que hay lugares donde nos entra el agua y es donde tenemos que seguir trabajando. No es sencillo, son jugadores de diferentes edades. Hay chicos de 18 años y otros de 40 y pico. Y los más grandes están en un gran nivel y los de atrás están con ganas de participar. Por eso digo que no estamos nada conformes, no estamos cómodos. El confort no sirve, lo que tienen que buscar ellos es la incomodidad que les genere más energías y sacrificio. Hay mucha competencia también en el plantel y por eso hemos reemplazado a jugadores que se lesionaron con chicos que jugaron en gran nivel”, afirmó.
Raiteri también busca que el hecho de estar invictos no derive en un duro golpe en el plantel cuando aparezca la primera derrota.
“Hace varios partidos que venimos trabajando sobre lo que puede significar perder. Salvo Duendes que ganó dos veces de manera invicta el torneo, los campeones restantes todos han perdido. Lo venimos hablando, sabemos que no somos infalibles y que errores podemos cometer. Pero que sea todo parte de un proceso, que el final cuando llegue marque si fue exitoso o no”, expresó.
El exapertura ya tuvo un proceso anterior al frente del plantel superior, aunque reconoció que se apuró en dar el salto de jugador a entrenador.
“En 2007 apenas dejé de jugar fui entrenador y siempre digo que eso fue un error. Debería haber tenido un proceso como el que tuve después en el rugby Juvenil. Tendría que haberme alejado un poco. En ese momento dirigía a mis amigos y eso no fue bueno. Ahora no soy amigo de los chicos, soy su entrenador y estoy para lo que necesiten. Compartimos muchas situaciones, pero sabemos entre todos mantener esa distancia que también es importante. Igual, generamos un vínculo tremendo. Cuando los conocés descubrís otras cosas y eso es por el tiempo que pasás con ellos. Uno está más capaz también y ve las cosas desde un poco más lejos y eso ayuda”, afirmó.
Por último, Raiteri destacó el aporte que realiza Maximimiliano Chinchu Bustos, el ex-Puma que se incorporó hace un par de años a trabajar con el equipo.
“Es un aporte de experiencia permanente y no solamente desde lo deportivo que es importantísimo, sino en lo personal. Es una excelente persona. También te diría cosas maravillosas del resto del staff. Tenemos un equipo importante de trabajo que está dando todo. No es fácil, pero creo que lo estamos haciendo relativamente bien”, finalizó.