Este lunes a la mañana absolvieron de culpa y cargo, Rubén Ángel Vázquez, ex intendente de San Benito y ex diputado provincial, que fue juzgado por el presunto delito de falsificación de documento público. La causa se inició en junio de 2005 y, 18 años después, fue sentado en el banquillo de los acusados junto a su exsecretario de Gobierno José Luis Cogno. El dirigente peronista de Paraná Campaña había sido acusado de antedatar un decreto para apartar a un empleado de tesorería. La sentencia fue dictada por el juez Alejandro Cánepa.
Absolvieron al exintendente de San Benito Rubén Vázquez
La acusación la ejerció el fiscal Ignacio Aramberry y la defensa del acusado estuvo a cargo del abogado Marciano Martínez.
La causa está caratulada hace casi dos décadas como “Vázquez, Rubén Ángel –Cogno José Luis S/ falsedad ideológica de instrumento público”.
La investigación se inició con una denuncia en junio de 2005 contra Vázquez (entonces intendente) y otros funcionarios municipales por el supuesto delito de falsificación de un decreto y una notificación oficial. Sin embargo, la causa contra el ex intendente nunca pudo avanzar ya que, cuando se concluyó la investigación, ya contaba con inmunidad parlamentaria.
Vázquez fue denunciado por el ex tesorero del municipio de San Benito, Edgardo Valdemarín, quien cuestionó que haya sido separado de su cargo. Sostuvo que fue desplazado de forma irregular.
Valdemarín contó que fue designado como tesorero municipal en 1996 y luego del último recambio de autoridades, el 12 de diciembre de 2003, se le comunicó que se iba a nombrar a otra persona en su puesto, aclarándole que todo se haría “de forma legal”. Luego, durante sus vacaciones, se le liquidó el sueldo sin los adicionales que le correspondían a su cargo, por lo que solicitó una aclaración de la situación y ser notificado de cualquier tipo de cambio, aunque no obtuvo respuesta.
Al regreso de sus vacaciones, fue designado bajo las órdenes del contador municipal hasta que solicitó una licencia por enfermedad, en julio de 2004, y al regresar de la misma se le asignaron tareas de sereno en distintas reparticiones municipales.
El 15 de diciembre de 2004, transcurrido un año de las situaciones irregulares, Valdemarin –junto sus abogados de y un escribano– solicitó ver su legajo personal para verificar su situación ya que no había sido notificado de ningún cambio y aunque le negaron esa posibilidad, después del mediodía recibió un llamado telefónico en su domicilio para que se dirigiera al municipio. Una vez allí le dijeron que debía notificarse de un decreto. Luego de firmarlo, advirtió que estaba fechado en diciembre de 2003 y no en 2004, como era lo correcto.
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