Poco antes del mediodía, el conocido cura sanador Ignacio Peries llegó hasta el Palacio Municipal de Paraná para visitar a la intendenta Blanca Osuna. Tras la extensa charla mano a mano en su despacho, realizó una bendición a empleados municipales que le aguardaban en el patio.
Ignacio estuvo en Paraná y ratificó su deseo de radicarse en la ciudad
“Tenemos una gran amistad (con la Intendenta) y un gran proyecto. Ahora estoy en Paraná más tiempo que antes y quiero empezar unas obras nuevas. En el futuro vamos a tener más noticias que ahora recién empezamos”, dijo el sacerdote, conocido por su obra milagrosa y sus misas de sanación multitudinarias en Rosario.
Acerca del rumor sobre su posible radicación en la capital provincial, deslizó una chance cercana en el tiempo con una declaración entre risas: “Algún día, ya tengo casa”. Esto lo dijo en función de la reciente sede administrativa abierta a en calle Comandante Espora al 500. La congregación del padre Ignacio, la Cruzada del Espíritu Santo, está en camino a ser reconocida por el Vaticano.
“Vivir más cerca de la gente”
Fue inevitable consultarlo sobre su opinión acerca de todo lo que ha generado en la opinión pública en general, no sólo en la comunidad católica, la actuación del papa Francisco: “Son muchas cosas nuevas que van a pasar”, sentenció, agregando que a su entender “es un momento que necesitaba, un cambio grande de la mentalidad de la Iglesia para trabajar más cerca de los pobres”.
“Bergoglio es un hombre que caminó la calle, que sabe la realidad, la pobreza, los conflictos familiares y personales. Por eso todas las reflexiones que dio son importantes para el futuro de Argentina, de la Iglesia y del mundo. Dio una impresión importante. Van a ser muchos cambios positivos, para vivir más cerca de la gente, no del otro lado del escritorio. Se estará más en la calle, va a ser una bendición de Dios para todo el pueblo de Dios”, dijo.
Cuando se le preguntó por qué le gusta tanto Paraná, contestó entre risas: “Principalmente vine por la tarea de los chicos que estudian acá en el Seminario. En segundo lugar, saben que todos nosotros necesitamos un obispo referente ante Vaticano, Roma, para ver que trabajamos bien, asegurarse que nuestra forma de conducir es la correcta, nuestra vida sacerdotal, sobre todo más nosotros, que formamos sacerdotes. Para nosotros es monseñor Juan Alberto Puíggari, antes fue Maulión. Y cuando yo quería cambiar (de ciudad), Puíggari me recibió de vuelta y me dijo que me quede con él y que él va a apoyar. Así que como amigo y obispo nos ha apoyado, así que por eso elegí Paraná. Y la Intendenta también está dispuesta a ayudar”.
Blanca Osuna, muy emocionada, describió la “gran alegría” de la visita del padre Ignacio, al mencionar que “es una manifestación de cariño y de confianza, de reconocimiento a su trayectoria, a su importantísima obra; estoy muy contenta, orgullosa que podamos recibirlo en nuestra casa, en nuestro lugar de trabajo diario y que él acompañe y bendiga los proyectos que vamos desarrollando y algunos que vamos a desarrollar juntos”.
Tras el encuentro, el sacerdote realizó una bendición a empleados municipales que se acercaron a aguardarlo en el patio del edificio.
El padre Ignacio Peries Kurukulasuriya, nació el 11 de octubre de 1950 en Sri Lanka (India) y se ordenó sacerdote católico a los 29 años en Gran Bretaña.
Es superior de la Cruzada del Espíritu Santo, está afincado en Rosario, en la Parroquia Natividad del Señor y la primera vez que celebró misa fuera de allí fue el pasado 24 de abril de 2012 en la parroquia Nuestra Señora del Carmen, con la presencia de más de 40 mil fieles.