El marido de la empleada doméstica que estaba desaparecida desde el viernes y este miércoles fue encontrada muerta en el pozo ciego de su casa de la localidad bonaerense de Temperley, fue detenido en el barrio porteño de Constitución, informaron fuentes policiales.
Detuvieron al esposo de la empleada doméstica que apareció muerta
Se trata de Alberto Ponce (40), quien era buscado por la muerte de su esposa, Susana Beatriz Leiva (38), y que fue apresado durante la tarde de este miércoles por bicipolicías en la calle Salta, entre Pavón y Garay, tras haber sido reconocido por transeúntes.
Según las fuentes, el sospechoso, en cuyo poder se secuestró marihuana, quedó alojado en la comisaría 16ta. de la Policía Federal, desde donde será remitido a la Justicia bonaerense.
El cadáver de Leiva fue encontrado durante la mañana en su casa de Blanco Encalada 250 por policías de la Jefatura Departamental de Lomas de Zamora y de la división Canes que realizaron un allanamiento por orden del fiscal de ese distrito Héctor Toneguzzo.
Voceros judiciales dijeron a la agencia Télam que al momento del operativo no fue hallada en la casa la pareja de Leiva, Alberto Ponce, encargado de un edificio del barrio de Recoleta, con quien la víctima vivía junto a sus dos hijos de un año y medio y 10, por lo que la policía procuraba localizarlo de manera inmediata.
Las mismas fuentes dijeron que ese hombre fue quien radicó el sábado a la mañana ante la policía el pedido de averiguación de paradero de Leiva tras la desaparición registrada el viernes, aunque la familia de la víctima asegura que está implicado en la muerte.
Esta tarde el fiscal Toneguzzo se encaminaba al lugar del hallazgo, mientras dispuso que la policía localizara a Ponce para tomarle declaración.
En tanto, efectivos de la Policía Científica trabajaban en la vivienda de la víctima con el fin de establecer la data de la muerte y las circunstancias, aún no precisadas.
Un médico forense e integrantes de una unidad de Escena del Crimen preservaban esta tarde el lugar del hallazgo, aguardando instrucciones del fiscal.
Las hermanas y demás familiares de Leiva, por su parte, se acercaron a la vivienda de la víctima y entre gritos desconsolados y ataques de llanto acusaron a Ponce de lo sucedido, al tiempo que cuestionaron que recién se allanara la vivienda cinco días después de la denuncia de desaparición.
Un grupo de médicos del servicio público de emergencias y policías apostados en el ingreso a la vivienda debieron contener a los familiares conmocionados.
Leiva estaba desaparecida desde el 19 de julio pasado a las 8, cuando supuestamente salió de su casa de Temperley rumbo a su trabajo como empleada doméstica en un domicilio del barrio porteño de Recoleta.
El pasado lunes, su empleadora, María del Carmen, contó a Télam que Leiva trabajaba en su casa desde hacía 12 años y que jamás había faltado sin avisar, por lo que ese día la llamó a su celular y la atendió su marido, quien le dijo que se había olvidado el teléfono pero que había ido para su domicilio a trabajar como todos los días.
Desde entonces, nada más de supo de la mujer, hasta el hallazgo de su cadáver registrado esta mañana en su propia vivienda.
Fuente: Télam