El hecho ocurrió el martes por la tarde en plena Ruta Nacional N° 12, a la altura del kilómetro 230, cuando una beba de siete meses comenzó a tener dificultades para respirar tras ingerir un plástico de un paquete de galletitas. El coraje de un bombero voluntario de Ceibas y la práctica de primeros auxilios logró que esta historia dramática tenga un final feliz.
Bombero salvó a una beba que se estaba ahogando con plástico
La noticia la dio a conocer a través de las redes sociales Eugenia Mansilla, testigo presencial del hecho: “A las 18.30, al bombero Mauricio Bugia, le tocó vivir una situación jamás imaginada en la Ruta Nacional Nº12. Una mamá se encontraba con su bebita en brazos y pidiendo auxilio, ya que la niña, de unos siete meses, estaba teniendo problemas para respirar, debido a que se estaba ahogando con el plástico de un paquete de galletitas”, relató Eugenia sobre lo que ocurría.
El bombero de Ceibas, Mauricio Bugia es mecánico. Según su testimonio, había ido a la casa de un vecino a devolver una herramienta y fue cuando ve a una mujer en medio de la ruta, a los gritos, desesperada con su bebé en brazos. Descendió de su vehículo, se acercó a la mamá y le dijo que él le podía hacer una maniobra para que expulse el objeto que impedía respirar a la pequeña. Así fue, a los pocos instantes la beba pudo respirar, llorar luego, mientras él continuó haciéndole masajes hasta que estuvo por completo estabilizada.
Una vez garantizada la salud de la niña se la entregó a su mamá. "Hice lo que tenia que hacer con un final feliz y me fui. Cuando llegué al taller temblaba entero. Tengo dos hijos, uno piensa en ellos. Al estabilizarse la bebé me regaló una sonrisa y fue lo mejor que me pasó", dijo Bugia.