El exatracadero de balsas, histórico sector ubicado en Bajada Grande, que fue el principal acceso que tuvo la ciudad y gran parte de la provincia, durante gran parte del siglo XX. La característica insular de Entre Ríos obligó a conectarse sobre esta costa con el resto del país a través de balsas.
De aquella época de intenso movimiento sobre calle Estrada, hoy solo queda como resabio o recuerdo el cartel de bienvenida a la ciudad.
El atracadero de balsas dejó de funcionar hace ya seis años. Y ahora, en el marco de un acuerdo con el Ejército, la Municipalidad de Paraná resolvió concretar una bajada de lanchas de carácter gratuito para que funcione todo el año. Se trata de una forma de facilitar el acceso al río de muchos paranaenses y hombres de la región que gustan de disfrutar de paseos en el Paraná a bordo de sus lanchas.
Por tal motivo, se inició un proceso licitatorio y ayer se abrieron los sobres con una oferta para la instalación de una nueva rampa que funcionará como bajada de lanchas, por un monto superior a los 800.000 pesos.
Según se informó, su uso será gratuito, todo el año. Se emplazará sobre avenida Estrada 1828, en el sector hoy abandonado que fuera ocupado por el Batallón de Ingenieros Anfibios 121 de Santo Tomé, para prestar servicios de comunicación entre las capitales de Paraná y de Santa Fe.
Se prevé la reubicación de los dos galpones existentes, con el fin de liberar y reorganizar el espacio. De este modo, se instalará un área destinada a estacionar los vehículos de los usuarios, con capacidad para 15 vehículos; un área destinada a albergar los trailers de las embarcaciones, con capacidad para 12 trailers; espacios de circulación interna; una oficina de registro de datos de las embarcaciones, del propietario y sus acompañantes, sanitarios y muelle flotante para embarque.
“Si bien el predio fue cedido en comodato por el gobierno provincial a la Municipalidad de Paraná, hoy está en resguardo del Ejército Argentino, por lo cual la intervención tiene en cuenta el requerimiento y la custodia del Ejército”, explicó el secretario municipal, Guillermo Federik.
Una postal típica del siglo XX
El sistema de balsas para el transporte pesado o con sustancias peligrosas quedó en desuso a partir de la habilitación del puente que une las ciudades de Victoria y Rosario.
El servicio, a través de tres balsas, comenzó a operar en 1928 y generaciones de paranaenses y santafesinos debían trasladarse por esa vía ante la falta de una conexión física, que finalmente se concretó en 1969 con el túnel subfluvial.
Desde entonces, su utilización quedó restringida al transporte pesado de camiones con combustibles o sustancias peligrosas.
Verdaderos símbolos de la historia de la capital provincial, una de las balsas volvió a la costa paranaense en 2013 para sumarse a los eventos y festejos programados por el Bicentenario de la ciudad.
Exatracadero de balsas será bajada de lanchas
Se licitó la obra que intentará recuperar la funcionalidad del emblemático lugar para los paranaenses. Tendrá carácter gratuito
2 de julio 2015 · 06:35hs