Durante las últimas horas del miércoles, Pedro Castillo fue trasladado en helicóptero hasta la Dirección de Operaciones Especiales (DIROES), una sede policial en el este de Lima. El detenido ex presidente pasará allí 48 horas.
Pedro Castillo ya está en prisión después del autogolpe
Tras ser aprehendido en flagrancia por rebelión y conspiración, Castillo fue puesto bajo la custodia de agentes de la División de Investigación de delitos de Alta Complejidad (DIVIAC-PNP). Luego fue subido a un helicóptero hasta DIROES, donde también estuvo recluido el ex presidente Ollanta Humala desde julio de 2017 hasta abril del 2018.
Según indicaron medios peruanos, el ex mandatario iba esposado y en medio de un fuerte cordón de seguridad. Lo acompañarían durante la reclusión Aníbal Torres, ex presidente del Consejo de Ministros, quien asumiría su defensa técnica.
La Junta de Fiscales Supremos anunció acciones legales tras el "quebrantamiento del orden constitucional", en un video grabado por la fiscal de la Nación, Patricia Benavides, acompañada de otros letrados. La Fiscalía arribó en las últimas horas a las sedes de algunos ministerios para recabar documentación que contribuya a investigar contra el ex jefe de Estado por el delito de rebelión, el cual está regulado en el artículo 346 del Código Penal.
Después de brindar un discurso donde anunció la disolución del Congreso alrededor de las 15:00 -hora argentina- Pedro Castillo abandonó la residencia de Palacio junto a su esposa, Lilia Paredes, y sus hijos. Posteriormente, la comitiva presidencial ingresó a la sede de la Prefectura de Lima, encabezada por Benavidez y el fiscal adjunto supremo, Marco Huamán.