La pandemia del Covid-19 impactó de distintas formas en la vida cotidiana de la gente y sin dudas el 2020 fue un año en que modificaron cuantiosos hábitos y costumbres, debido al aislamiento social, preventivo y obligatorio (ASPO) que estuvo vigente durante varios meses en el país, y más tarde por el distanciamiento y otras medidas implementadas para frenar el avance del virus.
En 2020 hubo más uniones convivenciales que casamientos
Por Vanesa Erbes
En este contexto, la cantidad de matrimonios celebrados en Entre Ríos, según las estadísticas de la Dirección del Registro Provincial y Capacidad de las Personas a las que accedió UNO, se redujo un 38%: el año pasado se concretaron 1.634 casamientos, frente a 2.633 enlaces ante la ley registrados a lo largo del 2019. Si esto se refleja en un promedio, considerando los días hábiles, el anteaño se casaron alrededor de 10 parejas por día, y en 2020 fueron seis por día.
Las variables que influyeron en esta merma son variadas, pero sin dudas la imposibilidad de hacer una fiesta multitudinaria con amigos y familiares, y la restricción n sus actividades que mantuvo durante algunos meses el Registro Civil –que es donde se realiza el trámite–, fueron los motivos que más incidieron.
El organismo reveló además que durante el 2020 se registraron 1.665 uniones civiles en la provincia. Se trata de una opción que está regulada por el Código Civil y Comercial vigente para proteger los derechos de las parejas que conviven y comparten un proyecto de vida común, pero sin casarse legalmente. Al acreditar la convivencia se puede acceder a determinados beneficios, como la obra social, o tramitar un crédito, por ejemplo, pero quedan exceptuados de la vocación hereditaria.
El dato a destacar es que si bien el año pasado hubo menos uniones civiles que en 2019 en Entre Ríos, cuando se inscribieron 2.209, superaron por el ajustado margen de 31 casos a la cantidad a los casamientos. No obstante, desde el Registro Civil dieron cuenta de que el año pasado en Paraná los casamientos fueron más: 232 parejas dieron al gran paso para convertirse en marido y mujer, y 215 optaron por la unión convivencial.
“Sí, quiero”
En marzo de 2020, cuando se decretó el ASPO en el país, tras declararse la pandemia del coronavirus, se suspendieron las celebraciones de matrimonios y las uniones convivenciales en la provincia.
Tres meses después, la Dirección del Registro Civil y Capacidad de las Personas reanudó este servicio, con el levantamiento del ASPO y el establecimiento del distanciamiento social. Sin embargo, la situación sanitaria llevó a que en Departamentos como Paraná y Gualeguaychú se volvieron a suspender hasta el 20 de septiembre. Por eso se advierte que la cantidad de casamientos y uniones convivenciales fue muy dispar durante el año pasado. “Los meses donde hubo más ceremonias en 2020 fueron febrero, octubre, noviembre y diciembre”, informó a UNO Victoria Aizicovich, la titular del organismo provincial.
Este tipo de trámites se retomó con estrictos protocolos que hasta hoy se mantienen vigentes: solamente pueden asistir los dos testigos a la ceremonia del civil o unión convivencial, sin presencia de amigos o familiares, utilizando barbijo o tapaboca y aplicando las demás medidas sanitarias. “Con suerte puede ingresar el fotógrafo”, confió a UNO Romina Werner, wedding y event planner en Paraná con una amplia trayectoria en la organización de bodas.
Aunque es imposible predecir qué pasará este año, las ganas de casarse cobraron mayor impulso con la flexibilización de varias de las medidas ante el coronavirus, como la posibilidad de mantener reuniones con determinada cantidad de personas al aire libre –según la situación sanitaria de cada zona– y también con la llegada de la vacuna contra el Covid, si bien aún no se aplica de manera masiva. En este marco, Werner señaló: “Más allá de la flexibilización y las normas, que todos los días van cambiando y se van modificando, en mi caso se han incrementado notablemente las consultas de clientes que buscan el servicio de una organizadora de eventos para comenzar con la programación de una boda”.
“Ha habido muchas consultas para propuestas de matrimonios para el 14 de febrero (que este año cae domingo), que se van a llevar a cabo, y para varias bodas”, dijo, y observó: “Lo que más preocupa a la pareja de novios que deciden casarse hoy en día, más allá de la incertidumbre, es cómo llevar adelante un evento con protocolos. Nadie está preparado para eso y no sabemos cómo hacerlo. Y culturalmente, en la Argentina la pista de baile pasa a ser un embudo, por así decirlo, un lugar de encuentro. No nos imaginamos una fiesta sin encontrarnos en la pista bailando para compartir el festejo. Entonces, como esto está bastante restringido y limitado, la duda más grande que tienen los novios es cómo resolver esta cuestión”.
Sobre este punto, afirmó: “Nos dicen ‘yo me quiero casar, pero quiero pista de baile, celebrar, hacer el trencito ¿cómo hago?’. Entran en una gran laguna en todos los aspectos: legal, emocional, y para definirlo llegan a las organizadoras de eventos, que somos quienes estudiamos los protocolos íntegramente, todo el tiempo, para ver cómo implementar esas medidas y ser creativas a la hora de encontrar una solución a estas demandas”.
Divorcios
Según informó a UNO la Dirección del Registro Civil y Capacidad de las Personas, en 2020 se presentaron en el organismo 1.391 oficios para inscribir sentencias de divorcio en toda la provincia, cuando en 2019 fueron 1.509.
No obstante, se estima que, más allá de la cantidad de divorcios que efectivamente se registraron, la cuarentena trajo una ola de separaciones y hay más cantidad de trámites para disolver el matrimonio que en años anteriores.
Esto no se dio solo en Entre Ríos y en el país, sino en todo el mundo. El análisis que hicieron numerosos especialistas es que muchas parejas se vieron obligadas a pasar más tiempo juntas y esto generó desavenencias que afectaron la estabilidad de la relación.