Esta semana se viralizó en las redes sociales una denuncia colectiva por parte de consumidores y ex empleados de ‘Las Mercedes’, una casa de comidas de la capital provincial. Un usuario, ‘Tomy’, compartió su experiencia a través de su cuenta y recibió cientos de mensajes que manifestaron haber recibido comida en mal estado e incluso ex empleados que denunciaron malos tratos y condiciones poco higiénicas de las sucursales de Paraná. El joven los compartió, visibilizando la preocupante situación en torno a la rotisería.
Paraná: realizaron denuncias graves a casa de comidas
Crédito: Tomy
En diálogo con UNO Tomy, quien decidió proteger su identidad, explicó la situación que lo llevó a compartir su mala experiencia: “El martes por la noche me encontré con un amigo, su pareja y una amiga, para comer. Hicimos el pedido alrededor de las 21:30 y nos llegó a las 23 horas”, recordó. “Preparamos los sandwiches, los cortamos por la mitad y cuando tomé mi porción, mastiqué y estaba durísimo, similar a comer goma. Cuando me lo saqué de la boca, lo olí y enseguida me invadió el olor a carne podrida. Abrí el sandwich y tenía una hilera de cuatro carnes, dos de ellas tenían un color entre amarillento y gris. Para no pensar que fue error mío, se lo mencioné a mis amigos y me confirmaron que la carne tenía olor a podrido”.
El joven detalló que realizó un llamado a la sucursal y “lo primero que quisieron hacer fue enviar otro sandwich -habíamos pedido dos- pero sólo uno, porque el otro no habría estado en estado de descomposición. Evidentemente, uno que está podrido no te da ganas de comer el segundo. Las personas del local nos insistieron en que sólo podían darnos un sandwich”. En ese momento, Tomy decidió dejar de recibir la llamada y una de sus amigas gestionó la situación: “Ella pidió de buena manera la devolución del dinero, porque la comida estaba en mal estado, no quería comer eso, sino pedir de otro local. Habíamos gastado 2.200 pesos y desde el local Las Mercedes le reiteraron que no le devolverían el total, sino ‘lo que podían’. Sólo devolvieron 1.400. A raíz de eso, sentimos que nos tomaron el pelo y tomé la iniciativa de hacer un video mostrando lo que había pasado”.
Las denuncias
En las primeras horas del día siguiente, Tomy relató que solamente recibió mensajes de su grupo de amigos contando sus malas experiencias, pero luego le fueron de llegando de gente que no conocía. “Al principio fueron consumidores contándome que recibieron comida en mal estado, hamburguesas de carne cruda e incluso pedazos de cáscara de huevos, uñas o nylon. Pero escaló a cosas más graves, como las condiciones del lugar y más tarde ex empleados me contaron sus experiencias, que fueron muchos más mensajes de los que me llegaron de los consumidores”. El joven remarcó que recibió entre 200 y 300 mensajes con testimonios.
Las denuncias que compartió Tomy en su perfil fueron diversas, pero abundaron las de ex empleados. “Hace mucho trabajé ahí y confirmo todo lo que dijeron (...) En la cocina, cuando la carne estaba vieja literalmente de dos semanas, hacían una salsa para tapar el gusto a viejo. Para ellos parece normal porque nunca asumieron que venden carne vieja”, relató un ex empleado. Otro sumó: “Aguanté un par de meses trabajando ahí, una fiesta de ratas y una vez me obligaron a hacer una tanda de hamburguesas con carne pasada” y así, muchos testimonios más que se sumaron en la semana.
Sobre una denuncia al Instituto de Control de la Alimentación y Bromatología (ICAB) de la provincia de Entre Ríos, el joven manifestó que “el área de Paraná no tiene un teléfono que esté funcionando o, por lo menos al que yo llamé, no me atendieron. Sí envié a distintas páginas, como a Bromatología Entre Ríos y al director de Bromatología de la ciudad de Paraná. Envié un mensaje, mostré las capturas y le dije lo que sucede en Las Mercedes”, detalló y aclaró: “no me respondió la autoridad en sí, sino un administrador que manifestó ‘estar al tanto de la situación y que se iban a hacer cargo’”. Por otro lado, una de las amigas de Tomy que comió aquella noche con él, consiguió un contacto de Bromatología y “le dijeron que, supuestamente, clausurarían el local pero no sé en qué quedó esto”. Finalmente, el Tomy resaltó: “no es una saña personal hacia ellos, pero sí es un atropello a la salud de la gente”.