La UNER se verá beneficiada por el anuncio del gobierno nacional de la instrumentación del denominado Programa Nacional de Inversión en Infraestructura Universitaria 2019-2023, que incluirá 63 nuevas obras en 47 universidades nacionales. Propone una inversión para ese período, de más de 9.600 millones de pesos para obras nuevas, de refacción y ampliación de la infraestructura, que beneficiarán a más de 1 millón y medio de estudiantes y generarán 13.500 puestos de trabajo, 3.500 directos y 10.000 indirectos, para la población de las más de 50 ciudades donde se encuentran ubicadas.
UNER: $180 millones para el edificio de la Secundaria
En el caso de la Universidad Nacional de Entre Ríos (UNER) se encarará la finalización de la construcción del edificio de la escuela Técnica Secundaria ubicada en la ciudad de Concordia, dependiente de la Facultad de Ciencias de la Alimentación. La asignación prevista inicialmente es de 178.598.904 pesos.
Se trata de una ampliación para la terminación del edificio en construcción, ubicada en un predio lindante al Centro de Integración Comunitaria (CIC) Víctor Opel en Concordia, que tiene un avance del 15%. La obra había sido iniciada años atrás, pero debido a las restricciones presupuestarias y reducciones de partidas durante el anterior gobierno nacional, no pudo avanzar. Comprenderá alrededor de una veintena de aulas, talleres, comedor y salón de actos, entre otras dependencias.
La institución funciona desde hace cinco años, y ocupa la Parroquia San Francisco, del barrio Constitución. “Surgió dentro del programa Escuelas secundarias de la universidad, con el propósito de crear establecimientos técnicos en barrios carenciados”, explicó a UNO el decano de Alimentación de la UNER, Oscar Gerard.
“En el país hay cinco, cuatro en la provincia de Buenos Aires, y la única en el interior es de Concordia”, explicó.
Ese proyecto educativo gestado en 2014 a nivel nacional, apunta no solo ampliar las vacantes del nivel Medio sino también poner en práctica un modelo institucional y curricular distinto del tradicional que asegure a los adolescentes y jóvenes de esa zona, mejores oportunidades de permanencia y egreso de la escuela secundaria y de acceso a aprendizajes y experiencias formativas relevantes, fundamenta la decisión.
Actualmente tiene los cinco primeros años, de los siete correspondientes al nivel Técnico. Cada año ingresan 75 alumnos, por lo que la matrícula actual es de unos 375 adolescentes.
“Siempre tenemos más alumnos de los que podemos recibir, porque no hay ninguna posibilidad en esa zona de acceder a una escuela técnica. Por eso se creó allí,donde solo había escuelas medias”, planteó Gerard.
El horario escolar de jornada extendida es de 8.30 a 16, con puertas abiertas a partir de las 8, y se sirve desayuno, almuerzo y merienda. Además, dentro del horario escolar, los estudiantes también asisten a Educación Física y Educación Artística.
“La idea siempre fue que los egresados de esta escuela puedan elegir y continuar una carrera en nuestra universidad”, sostuvo.
Luego de los tres años de Ciclo Básico, prosiguen otros cuatro años del Ciclo Superior, que propone dos orientaciones: Técnico en Programación (Informática) y Técnico en Industrias de Procesos, ambas con un plan de estudios de siete años de duración total.
“Para los egresados de Industria de Procesos tenemos la carrera de Ingeniería en Alimentos en la Facultad; y para quienes finalizan con la tecnicatura en Programación, la salida sería la carrera de Mecatrónica”, señaló el decano.
Labor durante la pandemia
Afectada como todas las instituciones educativas por las restricciones impuestas por el aislamiento social, el desarrollo del ciclo escolar prosiguió con la modalidad a distancia. Sin embargo, debió sortear las dificultades existentes entre los alumnos, muchos de los cuales no disponían conexiones o aparatos para un proceso educativo virtual.
Ante ello, contó Gerard, se hicieron colectas en la facultad para conseguir celulares viejos, chips, y también desde la UNER se hizo un aporte de chips para que puedan disponer de conexiones.
“Se ha venido trabajado bastante bien, con un buen seguimiento. Tenemos coordinadores que siguen y acompañan a los docentes y le dan una mano en la vinculación con las familias y los chicos. Incluso se hacen vistas y se relevan necesidades”, mencionó.
En ese sentido, señaló también que teniendo en cuenta la inasistencia por la pandemia, el colegio secundario lleva adelante un programa de alimentos. En este contexto, se arman y reparten módulos de comidas, cada 15 días, con alimentos no perecederos.
Una inversión que llegará a 47 universidades nacionales
El programa demandará una inversión de 9.600 millones de pesos, contará con el financiamiento internacional de CAF - Banco de Desarrollo de América Latina y generará 3.500 empleos directos y 10.000 indirectos, informó Presidencia.
Las obras serán en universidades de la Ciudad y la provincia de Buenos Aires, Catamarca, Chubut, Corrientes, Córdoba, Entre Ríos, Jujuy, La Pampa, La Rioja, Mendoza, Misiones, Neuquén, Río Negro, Salta, San Luis, San Juan, Santa Fe, Tierra del Fuego y Tucumán.
La iniciativa es un “paso fundamental para profundizar el desarrollo de la investigación en las universidades y ampliar el derecho al acceso a la educación superior, de la que todos debemos estar orgullosos en este momento tan crucial y complejo”, evaluó el ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta.