Luego de 17 días de competencias, los Juegos Olímpicos de Londres bajaron el telón el domingo con una fiesta cuyos protagonistas son el rock y el pop, géneros en los que Gran Bretaña ha prodigado al mundo artistas fabulosos, algunos de los cuales están presentes en la ceremonia de clausura.
Un final de fiesta a toda orquesta
Annie Lennox cantó en la proa de un barco fantasmal, George Michael hizo bailar a los atletas, mientras el graderío desplegaba imágenes y mensajes luminosos; Taio Cruz exhibió su herencia brasileña y británica al cantar en un auto descapotable; Jessie J se le unió en el escenario tras circular en otro vehículo. Las Spice Girls prefirieron llegar en taxis y encendieron el ánimo del público.
Muse interpretó el tema oficial de las Olimpiadas Londres 2012 los exintegrantes de Queen Brian May y Roger Taylor "conmovieron" el estado con We will rock you.
John Lenon y Freddie Mercury estuvieron también presentes en el homenaje a través del coro de Liverpool que interpretó Imagine mientras decenas de personas formaban su imagen, y un holograma de Mercury repetía su vocalización en el mítico recital en Wembley.
Muestrario
Los primeros en aparecer fueron los Madness en medio de una "fiesta callejera", una tradición británica celebrada con cientos de "Union Jack" en un campo de juego convertido en una pequeña Londres.
El ska de los Madness, que interpretaron "Our House", sacudió al estadio, antes de que los Pet Shop Boys tocaran "West End Girls, con un intermedio del clásico del britpop "Parlike" de Oasis interpretado por una orquesta.
A continuación, fue el turno de Ray Davies, el cantante de los Kinks, una de las grandes bandas de los años 60 junto con los Beatles, los Rolling Stones y The Who.
Davies, un personaje único del rock inglés, salió de un auto para interpretar "Waterloo Sunset" (1967), una balada sobre dos amantes en un puente londinense que conmovió a las 80.000 personas presentes en el estadio de Stratford.
Tras la pausa por el ingreso de los abanderados de cada delegación que participó en los Juegos y los atletas, llegó un montaje especial con John Lennon cantando "Imagine", el himno pacifista que fue coreado por todo el estadio.
Una ovación recibió a George Michael con "Freedom", que aparecía escrito en las tribunas gracias a uno de los tantos efectos especiales utilizados durante la ceremonia de clausura.
La constelación de estrellas no daba respiro y se sucedía, mezclando lo viejo y lo nuevo, lo clásico y lo que lo será dentro de algunos años.
Los Kaiser Chiefs, una de las bandas británicas más populares de las últimas años, ofrecieron su versión de "Pinball Wizard", una de las canciones de la ópera rock "Tommy" de The Who, con decenas de motocicletas con "Mods", la tribu urbana seguidora de este grupo en los años 60.
Ausente en el estadio olímpico, una gloria de la música británica como David Bowie fue homenajeado con una serie de sus mejores composiciones, desde "Space Oddity" hasta "Let's Dance", tras lo cual la esbelta y platinada Annie Lennox cantó "Little Bird" montada en un barco de madera.
El DJ británico Norman Quentin Cook, más conocido como "Fatboy Slim", convirtió Stratford en una pista de baile con sus hits "Right Here, Right Now" y "The Rockafeller Skank".
Para mucha gente lo mejor estaba por venir con las Spice Girls y su "Wannabe" y "Wanderwall" de Oasis, interpretada por su vocalista Liam Gallagher junto con Beady Eye.
Luego, en otro momento muy emotivo, dos de los miembros de Queen, Brian May y Roger Taylor, salieron a escena para tocar "Brighton Rock" y "We Will Rock You", otro himno del rock, con Freddy Mercury haciendo cantar a la gente desde las pantallas.
Un Londres satisfecho de la misión cumplida ofrece un fin de fiesta pletórico de música y anticipa al ritmo del samba su continuidad en Río 2016.
Fuente: London2012, Infobae, Télam