Juan Manuel Locatelli dejó el básquet profesional. La decisión la tomó al no poder recuperarse de una lesión sufrida en su tobillo izquierdo en un entrenamiento previo a un partido con Atenas en Córdoba cuando representaba a Sionista en la temporada pasada.
Tras la lesión, decidió el retiro
En aquel entonces, el alero tresarroyense se ausentó del choque con el elenco Griego y en el siguiente cotejo, ante Olímpico en La Banda, jugó apenas 7 minutos y medio, aquejado por un fuerte dolor. “No podía ni pisar”, confesó al diario El Atlántico en diálogo telefónico uno de los principales exponentes de la historia de Peñarol, donde pasó gran parte de su carrera.
El 11 de diciembre de 2011 en el triunfo de Sionista sobre Olímpico en La Banda por 66-65, Manu se despidió de su actividad sin saberlo.
Después llegó una operación mal hecha y una infección que lo instó a decidir dejar el básquet. “Me fui de raje a Paraná y me vio Batista (NdR: Jorge, el médico de Boca). Tenía una infección tremenda y menos mal que no me quedé en Paraná porque si no, no sé qué hubiera pasado”, confesó a dicho medio. “Hice la rehabilitación pero siempre me molestó, incluso hoy por hoy me sigue jodiendo, entonces tomé la decisión de dejar de jugar”, relató el ahora exjugador, que en octubre cumplirá 38 años.
“En el entrenamiento donde me lesioné se me fue el pie para adelante y sentí un pinchazo. Supuestamente era una pavadita que me iban a operar y podía volver a los 20 días, pero acá estoy, laburando con mi viejo en Tres Arroyos”, contó el campeón con Atenas en la temporada 2008-2009, que debutó en la Liga Nacional jugando para Peñarol el 14 de setiembre de 1994 ante Andino de La Rioja.
Uno de los jugadores más identificados con la historia de Peñarol le dijo adiós al básquet por obligación. Una lesión mal curada lo hizo retirarse. Hoy, Locatelli disfruta de su familia, del verano en Claromecó y ayuda a su padre en un negocio de automóviles, destacó Pickandroll.