Dormir con la mascota: cuáles son los efectos del "colecho canino"
La especialista señaló que existen mayores posibilidades de conciliar mejor el sueño con la presencia de una sola mascota en vez de varias, ya que cuando hay más de una se incrementa el riesgo de tener dificultades para dormir.
El informe también aseguró que la razón por la cual muchos dueños de animales encuentran comodidad con ellos en la habitación es porque los sienten como miembros de su propia familia y desean integrarlos a sus vidas de todas las formas posibles.
Muchas familias se acostumbran al "colecho canino" cuando el perro es un cachorro. Un informe de la Asociación Americana de Mascotas concluyó en el año 2015 que el 65% de los perros pequeños suele dormir con sus dueños. En el caso de los canes medianos el porcentaje se reduce hasta el 41 por ciento. Y si son grandes, hasta el 32 por ciento. Lo más llamativo es que la mayoría de las personas que duermen con su perro lo niegan públicamente.
Pero, ¿es bueno dormir con la mascota? La doctora en veterinaria Marina Snitcofsky (MN 8066) aseguró en diálogo con Infobae que "el principal riesgo que conlleva dormir con el perro en la cama, más allá de las posibles alergias del dueño, tiene que ver con la posibilidad de que exista un problema jerárquico que fomente conductas agresivas. Los perros necesitan establecer una jerarquía con los miembros de su grupo, y los principales recursos que tienen importancia jerárquica son: la comida, el sitio de descanso, el control de los espacios y el control de las interacciones. Si el perro duerme en la misma cama que los dueños, le dará al animal una prerrogativa de dominancia y puede luego defender la cama como propia si lo quieren bajar o si se le acercan".
Si las mascotas están limpias, no hay ningún inconveniente para el organismo. Será muy importante cuidar la salud e higiene del animal. Cambiar sábanas, cubrecamas, mantas y almohadones constantemente. Además, también puede ser un problema para personas alérgicas. Según algunos estudios médicos, es importante que las personas que padecen de alergia o asma no duerman con sus mascotas. De hecho, ni siquiera deberían dejarlas entrar en sus habitaciones.
También, estar alerta de cualquier mancha o textura extraña que se encuentre en la piel de la mascota y que pueda advertir sobre pulgas o garrapatas, ya que se pueden contagiar a los humanos.