"Creo que un segundo más y ya se nos iba, pero justamente por la gracia de Dios salió adelante y estamos eternamente agradecidos todos", dijo Daniel Schneider, el padre de Timoteo, el nene un año y tres meses que el viernes cayó al agua y por los trabajos de RCP pudo salvarse.
Recibiría el alta en las próximas horas el bebé que cayó en una pileta de natación
Timoteo tiene un año y tres meses. Sus papás lo encontraron flotando en una pileta, pero lo rescataron a tiempo. Está internado en el hospital San Roque
10 de diciembre 2017 · 09:57hs
Timoteo pudo ser víctima de una fatalidad, de esos accidentes domésticos que ocurren en un segundo y se lamentan el resto de la vida, pero el rescate a tiempo de los padres que lo encontraron flotando en una pileta d natación en Pueblo Belgrano (Gualeguaychú), el rápido traslado de los policías que en el camino hicieron Reanimación Cardiopulmonar (RCP) y la atención en la guardia del hospital Centenario, fueron decisivos para que hoy todo quede en una fea anécdota.
Según publica El Día de Gualeguaychú, el viernes por la tarde el oficial Nery Frías y el sargento Lucas Chesini, funcionarios de la comisaría Quinta acudieron a una casa ubicada en calle San Salvador en donde un niño de un año había caído al agua en una pileta.
Los padres habían encontrado al pequeño flotando y cuando lo sacaron estaba morado. Sus gritos alertaron a los vecinos y enseguida tomó conocimiento la Policía, pero mientras todo esto sucedía fueron los padres del niño quienes le hicieron las primeras tareas de reanimación.
Cuando los policías Frias y Chesini llegaron, decidieron subirlo rápidamente al patrullero y llevarlo. Mientras el sargento conducía hasta el hospital, el oficial realizaba los trabajos de RCP. En pocos minutos atravesaron la ciudad con la colaboración de motos que liberaron el tránsito. En el nosocomio los esperaba el protocolo de emergencia para este tipo de casos.
Una vez allí, los médicos del lugar definieron el traslado al hospital San Roque de Paraná. Iba directo a Terapia Intensiva, pero según contó su padre cuando llegó a la capital entrerriana "su pronóstico era favorable. Cuando lo vio el medico en la guardia dijo que no era necesario y fue directamente a sala común".
Afortunadamente el estado del niño es muy alentador, pero igualmente se decidió mantenerlo en observación por 48 horas. "Esta estable, está mejor, incluso comenzó a hidratarse, estaba sin alimentación, tomó leche a la mañana y a la tarde, comió manzana al mediodía y eso lo ayudó a recobrar el ánimo", indicó su papá.
"En estos momentos está con suero y le están dando una pequeña dosis de oxígeno para ayudarlo, pero tiene una buena oxigenación cerebral que es lo más importante", manifestó Daniel; y agregó que el sábado "le hicieron placas, laboratorio, de todo. Evoluciona bien, le controlan la fiebre. Duerme por momentos y por otros está molesto, llora, pero estamos esperanzados que posiblemente mañana o el lunes nos den el alta".
Afortunadamente el estado del niño es muy alentador, pero igualmente se decidió mantenerlo en observación por 48 horas. "Esta estable, está mejor, incluso comenzó a hidratarse, estaba sin alimentación, tomó leche a la mañana y a la tarde, comió manzana al mediodía y eso lo ayudó a recobrar el ánimo", indicó su papá.
"En estos momentos está con suero y le están dando una pequeña dosis de oxígeno para ayudarlo, pero tiene una buena oxigenación cerebral que es lo más importante", manifestó Daniel; y agregó que el sábado "le hicieron placas, laboratorio, de todo. Evoluciona bien, le controlan la fiebre. Duerme por momentos y por otros está molesto, llora, pero estamos esperanzados que posiblemente mañana o el lunes nos den el alta".
Daniel Schneider quiso destacar "el trabajo maravilloso de los policías". "Fue un trabajo espectacular, como papá me saco el sombrero por lo que hicieron y en el hospital también. Quiero felicitar a todo el personal, el pediatra, su equipo de trabajo, muy buen trabajo el de todos", acotó.