Fue tal vez la última instancia judicial previo al arribo a un juicio oral y público, o bien de un acuerdo en un procedimiento abreviado, de la organización narcocriminal que operaba en la zona oeste de Paraná, conocida como la banda del Gordo Nico, por ser el presunto jefe Nicolás Castrogiovanni. Este hombre del barrio Paraná XVI había sido detenido en diciembre junto a otras 13 personas, pero cuatro meses después cayeron quienes serían los proveedores de cocaína. Se trata de Ramón Ariel Pucheta y Jorge Sebastián Andino, conocido como el Negro Sugus. Ambos presentaron un recurso de apelación al procesamiento el mes pasado, pero la Cámara Federal de Apelaciones de Paraná les rechazó el pedido.
Van a juicio los proveedores del "Gordo Nico"
La Cámara Federal rechazó la apelación de Ramón Pucheta y "Sugus" Andino, que seguirán detenidos
9 de septiembre 2016 · 08:19hs
El abogado santafesino Claudio Torres del Sel, defensor de Pucheta, sostuvo que jamás en esta investigación se pudo determinar quién era "Ariel", la persona que proveía estupefacientes, ya que es el primer nombre del imputado como se lo conoce. Afirmó que cuando se allanó su casa no se secuestró ningún elemento que lo ligue con esta causa, y destacó que la única prueba que para el juez es contundente son los dichos de dos personas. Señaló que jamás se intervino un teléfono de su defendido y resaltó que no tiene relación con causas vinculadas al tráfico de drogas.
Por su parte, el defensor de Andino, José Ostolaza, afirmó que después de una larga investigación, nunca se pudo determinar que realmente fuera ese muchacho quien vendiera la droga a Castrogiovanni, y que en el allanamiento no se secuestró ningún elemento vinculado al delito. Sí elementos de comunicación que no se ha acreditado que tuvieran vinculación con la banda investigada. Sostuvo además que hay ausencia absoluta de prueba, y que las comunicaciones telefónicas no pueden ser elementos autónomos, sino que tienen que ser vinculados con otras pruebas.
Los vocales Daniel Alonso, Cinctia Gómez y Mateo Busaniche analizaron las pruebas y sostuvieron que "surge claramente que en las tareas de investigación y escuchas telefónicas, se determinó que quien proveería de estupefacientes a Castrogiovanni era una persona llamada 'Ariel', secundado por Sebastián Andino, respecto de los cuales no se había podido establecer datos".
Pero la Policía Federal había indicado que a raíz de tareas de las escuchas de otro expediente se pudo establecer por el timbre de voz, la manera de expresarse y el apodo que Andino continuaba respondiendo a las directivas de "Ariel", y que este era el presunto proveedor de Castrogiovanni, llamado Ramón Ariel Pucheta, con domicilio en Paraná, oriundo de Chaco. A su vez, reconocieron su identidad por su timbre de voz, modismo, entonación, inflexiones y el modo en que se comunica con Sugus, así como las conversaciones detectadas entre Pucheta y Castrogiovanni en relación al comercio de tóxico.
Las demás dudas deberán ser dirimidas en el juicio.