Una costurera que habría trabajado para una famosa modista, le inició una demanda civil a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, a quien le fabricaba los vestidos a pedido. La demanda es por más de dos millones. Entre otros vestidos, la mujer le confeccionó el vestido negro que Cristina utilizó el día en que asumió la presidencia para su segundo mandato.
Una costurera demandó a Cristina Kirchner por 2 millones de pesos
Le inició una demanda civil a la expresidenta y a la modista Susana Ortiz, quien le tuvo en negro durante nueve años.
28 de noviembre 2018 · 19:00hs
En rigor, la modista afirmó haber trabajado para la famosa diseñadora Susana Ortiz quien también le inició una demanda civil por su despido.
De acuerdo a la demanda, Belinda Castellano fue contratada en febrero de 2008 para trabajar en el taller de costura de Ortiz y dedicarse "exclusivamente a la demanda de los pedidos realizados por la entonces presidente Cristina Kirchner".
La denunciante señaló que todas las semanas realizaba uno o dos trajes para la exmandataria y que el resto de las costureras se dedicaba a confeccionar distintas prendas para otras figuras, como Mirtha Legrand o Susana Giménez. "Como la demanda de la señora Kirchner se iba acrecentando necesitaba de mi dedicación al 100%", indicó.
El contacto de Ortiz con Cristina Kirchner, según lo informado por el portal Infobae.com habría sido a través de Juan Manuel Campillo, exministro de Economía de Santa Cruz -hoy preso por lavado de dinero-, quien se casó con el exmarido de Ortiz, el fallecido diseñador Carlos Di Domenico.
La demanda en cuestión se debe a que Ortiz tenía en negro a la denunciante. "Nunca me pagó obra social, ni aguinaldo ni las vacaciones. Cuando me pagaba, me hacía suscribir papeles en blanco con mi firma, aclaración y número de documento. El taller donde confeccionábamos la ropa era totalmente insalubre, sin ventanas ni luz", denunció.
Cuando Cristina Kirchner dejó el cargo en diciembre de 2015 - cuando asumió Mauricio Macri-, Castellano afirmó en su denuncia que siguió haciendo trajes para la expresidente.
Hasta que a principios de 2017 comenzó a tener "un dolor muy fuerte en el hombro derecho". En ese momento, y cuando ya llevaba nueve años trabajando con la famosa modista, le pidió a Ortiz que la pusiera en blanco para acceder a una obra social y, de esa manera, a un kinesiólogo. Eso fue el final de la relación, porque a partir de ahí comenzó un cruce de cartas documento que terminó el 30 de octubre de 2017 pasado, cuando la mujer se dio por despedida.