Una chica mató a un hombre a puñaladas con una navaja

“Me quiso violar, yo me defendí”, era lo único que repetía la chica, con su ropa ensangrentada, cuando vecinos la vieron correr por la calle y pedir auxilio. Cuando llegaron policías en motos, la retuvieron y escucharon que decía lo mismo. “Estaba shockeada, corría por la calle pero no queriendo huir”, aseguró un agente. Minutos después, encontraron el cuerpo sin vida de Mario Farabello , de 67 años, en el interior de su departamento ubicado en el microcentro de Gualeguaychú. En el lugar, los investigadores secuestraron numerosos elementos que serán peritados y analizados para establecer qué sucedió. Se investiga la versión de la acusada, pero también la hipótesis de un intento de robo.
 

Poco después de las 19 del viernes, una vecina llamó al 101, porque vio a la joven que corría desesperada con sangre en sus prendas, manos y rostro. Enseguida llegaron los agentes que la interceptaron y la trasladaron a la Comisaría del Menor y la Mujer, y pusieron el hecho en conocimiento del fiscal Martín Gil, quien ordenó el allanamiento del lugar del departamento y él mismo se hizo presente.
 

El hecho produjo una profunda conmoción entre los vecinos, que salieron a la calle al escuchar los gritos, las sirenas y ver el despliegue policial. “Estábamos en la esquina cuando escuchamos los gritos. Nos acercamos, y una chica, con mucha sangre en su ropa, repetía nerviosa que había herido a alguien”, dijo un testigo.
 

La chica es de la ciudad, y se trata de determinar por qué razón estaba en la vivienda de Farabello. Algunos adujeron que ella explicó que fue para llevar una encomienda. El hombre, por su parte, había alquilado el departamento hace unos dos meses, luego de separarse de hecho de su esposa. Tenía dos hijos de 30 y 35 años, y era muy conocido en la localidad del sur provincial.
 

Los pesquisas de la Jefatura Departamental estuvieron mas de siete horas revisando el departamento 5º A, del edificio Torres del Sol, de Churruarín 58, entre 25 de Mayo y San Martín. Según se informó a UNO, allí secuestraron ropa, calzados, celulares, un arma blanca (una navaja que sería el arma homicida), un arma de fuego calibre 22, entre otras cosas, que serán peritadas. Además, se le practicó el dermotest a la joven y al cadáver, para saber si alguno disparó la pistola, y el cuerpo fue trasladado a la morgue judicial para la autopsia. Según consignó El Día, Farabello murió desangrado en su dormitorio, al lado de la cama, por una puñalada en la arteria femoral.
 

A la chica le extrajeron muestras de material genético que será cotejado para saber si existió algún forcejeo o actitud defensiva en el hecho. También se realizarán entrevistas de profesionales psicólogos y psiquiatras con la menor, para conocer su estado de salud mental y las condiciones en las que se produjo el crimen.
 

Fuentes policiales remarcaron a UNO que en la madrugada de ayer, poco antes de finalizar el trabajo en el departamento, arribó al mismo uno de los hijos de Farabello, quien se llevó una caja fuerte con una importante cantidad de dinero. Esto abona la teoría de que la chica podría haber tenido la intención de robarle. Se confirmó que estaba sola en el interior del edificio, pero, en la línea de esta hipótesis, no se descarta que haya habido un tercero esperándola en la vereda.
 

Por otro lado, la investigación espera confirmar mediante Gendarmería Nacional un hecho por el cual la menor había sido interceptada en el puente Rosario-Victoria con dos mayores hace más de un año. En ese momento la chica denunció que la habían secuestrado para prostituirla.