Pidieron perpetua para el femicida de Susana Villarruel

Dentro de 10 días se sabrá si habrá otro femicida tras las rejas de por vida en Entre Ríos. Ayer la Fiscalía pidió la pena de prisión perpetua para Ramón de la Cruz Ortiz, el hombre de 39 años acusado de asesinar a su expareja Susana Villarruel, de 38, en julio, en Gualeguaychú.

El viernes concluyó el juicio en el cual declararon decenas de testigos, entre familiares de la víctima y el victimario, vecinos del barrio Totó Irigoyen, policías que participaron de la investigación y los allanamientos, peritos y el médico forense. En los alegatos, los fiscales Lisandro Beherán y Martín Gil concluyeron en la autoría del crimen de Susana por parte de su exmarido. Como ya se había anticipado, dos pruebas claves dejaron a Ortiz al borde del encierro por el resto de sus días: el celular y la tarjeta de cobro de la Asignación Universal por Hijo pertenecientes a la mujer estaban ocultos en su vivienda.

Pero las demás evidencias, según los fiscales, permitieron demostrar que en la mañana del 10 de julio a la noche Ortiz fue a la vivienda de Susana, donde una vecina escuchó gritos pero no hizo nada, y luego la mató a golpes y dejó el cuerpo abandonado entre arbustos en inmediaciones del arroyo El Cura.

También fueron contundentes las palabras de Micaela Gómez, la hija de la víctima, quien contó que una semana antes del crimen su madre había sufrido con Ortiz una situación violenta.

Por esto, la acusación reclamó la máxima pena por el delito de Homicidio calificado por el vínculo, alevosía y violencia de género.

En tanto el abogado defensor martín Clapier reclamó la absolución por el beneficio de la duda ante la falta de pruebas contundentes, y sostuvo la inocencia de Ortiz, quien afirmó que aquella mañana buscó a Susana en su casa y la llevó en su remís a la parada de colectivos.

El 21 de noviembre, el Tribunal de juicios de Gualeguaychú adelantará la sentencia.