El jurado popular declaró culpables a los tres imputados por el homicidio de Marcelo Sifón, ocurrido el 19 de octubre de 2019 en Gualeguay. Así lo decidieron luego de deliberar al término del juicio donde se acusó a Joel De Zan, Jonathan Castaño y Gustavo Jaime por el delito de Homicidio agravado por el acuerdo premeditado de dos o más personas y críminis causae. Este viernes a las 8.30, el juez técnico les impondrán la pena única para ese delito que es la prisión perpetua.
Jurado popular declaró culpables a acusados de un homicidio
El asesinato de Sifón se produjo en el barrio Malvinas, luego de que el electricista fuera a reclamarle a los asesinos el celular que le habían robado a su hija. Más tarde, los tres jóvenes junto a otros más fueron a su casa y lo atacaron a balazos. Un tiro en la frente acabó con la vida del hombre conocido como "Bichi".
Tal como informó UNO, este jueves fueron los alegatos finales, donde el Ministerio Público Fiscal, representado por María Delia Ramírez Carponi y Gamal Taleb, pidió un veredicto de culpabilidad para De Zan, Castaño y Jaime por el delito mencionado con sus respectivos agravantes.
Luego los abogados defensores de los imputados hicieron sus alegatos. Ignacio Fernández solicitó al jurado que considere para su defendido De Zan una pena por homicidio simple y cargó contra el Ministerio Público Fiscal respecto de la legitimidad de las pruebas ofrecidas en video durante el juicio. Luego, Javier Ronconi, defensor de Castaño, pidió a los jurados y juradas que consideren que su defendido actuó en legítima defensa. A su turno las defensoras oficiales Susana Alarcón y Agustina Quatrocchi, solicitaron para Jaime, su representado, un veredicto de no culpabilidad.
Sobre el final de los alegatos de clausura y al momento de las réplicas, el fiscal coordinador Gamal Taleb, cuestionó los dichos del abogado Fernández que acusó al MPF de manipular pruebas. Entre ellas, las fílmicas. El fiscal aseguró que las acusaciones fueron “calumniosas”, garantizó la fidelidad del documento y responsabilizó al abogado por no haber hecho su labor para constatar la veracidad de la prueba o rechazarla en el momento oportuno. El resto de los abogados defensores de los imputados no hizo cuestionamientos sobre el accionar de los fiscales.