La fría madrugada del domingo en Concordia tuvo un amplio despliegue policial que sirvió para desbaratar una banda integrada por civiles y miembros de la fuerza policial de Entre Ríos. Un total de 23 personas, entre ellas dos policías, quedaron detenidas por robos calificados, comercialización de estupefacientes y provisión de armas de fuego.
Concordia: una banda de expertos en robos calificados
Un trabajo de siete meses de investigación finalmente culminó de manera exitosa, de acuerdo a lo indicado desde la propia institución. Dos funcionarios policiales de la división Delitos Rurales fueron los denunciantes en octubre de 2019. La causa quedó caratulada como asociación ilícita y otros, por lo que se les podrían atribuir más delitos a los involucrados.
Los 18 allanamientos positivos, que fueron ordenados por el juez Mario Figueroa, tuvieron su continuidad durante la tarde de ayer. Además, se montó un amplio operativo en la Jefatura Policial frente a la plaza 25 de Mayo, epicentro de la logística. De acuerdo a lo informado, hoy se realizarán las imputaciones y posteriormente se solicitarán las audiencias pertinentes.
Del operativo participó personal de toda la provincia, con 150 funcionarios de la división Delitos Rurales, además de grupos de Concordia, Concepción del Uruguay, Colón, Federal y Federación.
Resultados alarmantes
En el marco de los procedimientos quedaron detenidos y a disposición judicial 18 hombres y cinco mujeres. Además incautaron ocho armas largas, seis revólveres, siete pistolas, más de 300 cartuchos y una gran cantidad de cargadores. También secuestraron 889.350 pesos en efectivo, 10 automóviles, tres motos, 85 celulares, 13 envoltorios de cocaína y plantines de marihuana. Hallaron capuchas, guantes, uniformes tipo policías que estaban en poder de civiles.
Cabe destacar que de los dos efectivos, uno estaba prestando servicio en Colón y fue allí donde quedó a disposición de la Justicia. Durante los allanamientos, funcionarios policiales se encontraron con mercaderías, uniformes, herramientas que provendrían de algunos programas estatales de asistencia social. Es por ello que desde la Justicia se investiga qué grado de vinculación tendrían con la causa.
Tras los operativos en distintos puntos de la ciudad, fuentes judiciales consultadas por UNO indicaron: “Es una investigación que se viene haciendo hace meses con escuchas telefónicas, pudimos dar con una banda que se dedicaba a hacer robos entre otras cosas en domicilios particulares, generalmente cuando los propietarios no estaban, evidentemente con alguna logística que le permitía saber que había plata o que habían cobrado una determinada suma de dinero”.
En cuanto al modus operandi de los delincuentes, manifestaron: “En las escuchas se pudo ir determinando de qué robo estaban hablando porque en muchos casos lo hacían en tiempo directo. Sucede que a las escuchas las estudiábamos días después”. Además destacaron que “de los detenidos algunos están relacionados con la causa principal y que a muchos se los detuvo por tenencia de armas, comercialización de estupefacientes”.
Hablaron los jefes
En las últimas horas de la tarde se montó una conferencia de prensa en la Jefatura Policial, donde el comisario mayor, Jorge Cancio, indicó que la investigación “comenzó por el aporte que hicieron el jefe de la División Investigaciones dependiente de la Dirección de Delitos Rurales, Javier Ramírez y el oficial José Luis Duarte, encargado de la brigada Concordia de Delitos Rurales. A los dos funcionarios policiales detenidos se les inició una causa administrativa, paralela a la procesal penal. A estos procedimientos los hizo la policía de Entre Ríos en su conjunto, si bien somos dos direcciones distintas, pero también hay delitos perpetrados en zonas rurales, donde la gente es más vulnerable a raíz de las distancias”.
Por su parte, el fiscal a cargo Francisco Azcué indicó que se investiga “una asociación ilícita, una empresa criminal que se dedicó a cometer distintos delitos en la ciudad; robos calificados, comercialización de estupefacientes, provisión de armas de fuego. Esta banda estaba operativa hasta este momento. Son hechos graves y por eso nos llevó tanto tiempo. Desde la Unidad Fiscal queremos destacar la labor de la policía de Entre Ríos, demostrando un gran compromiso. Nuestro código penal reprocha esta conducta con una pena alta de tres a 10 años y cinco de mínimo para los jefes u organizadores. La persona detenida en Colón estaba prestando servicios en esa ciudad, pero es una persona de Concordia que habría cometido los delitos en nuestra ciudad”.
Respecto al hallazgo de elementos vinculantes a la asistencia social, Azcué expresó: “Nosotros no podemos dejar de actuar. Esto no quiere decir que esos funcionarios con cargos políticos intervengan en esa organización”, mientras que valoró la intervención de varios fiscales en esta causa. Por su parte, el jefe de fiscales, José Costa contó que “las pruebas que se secuestraron dan para continuar con una investigación. Encontramos mucha prueba, que pensamos que no íbamos a hallar. Hay algunos de los detenidos que tienen algunas causas en trámite”.