Un robo sin violencia en una vivienda de algún elemento cualquiera no es la gran cosa, pero muchos durante un año y medio, y cuando lo sustraído son herramientas para trabajar, ya es un problema. Así lo ven los vecinos de la zona de la Base Aérea de Paraná, que están cansados de que todas las semanas alguien cuente que le sacaron algo de su vivienda. A esto se le suma la venta de droga a la vista de todos e incluso cada tanto balaceras en plena vía pública.
Cansados de los robos y de nunca recuperar nada
Hace más de un año que "es algo habitual" que hayan sustraído algo de una vivienda. Además, la venta de droga prolifera a la vista de todos
17 de noviembre 2017 · 22:58hs
Algunos de ellos, en forma anónima por temor a represalias, decidieron hacer pública la situación que parece que se intenta ocultar.
"No son violentos ni nada, son rateros, pero es una cosa que están continuamente, una o dos veces por semana hay un vecino que se queja", contó uno de ellos a UNO.
Se trata de la zona que comprende las calles Jorge Newbery, Salvador Caputto, Gobernador Tibiletti, 2 de Abril, Soldado García, Miguel David, y alrededores.
"Antes siempre alguna pavada pasaba, pero no era con tanta frecuencia como ahora. Hace un año y pico que es habitual, a todos los vecinos les han robado, a uno el televisor, a otro le barretearon la puerta, una escalera, una garrafa, y esta semana a uno le llevaron una amasadora", expresó un hombre, y agregó: "Hay familias que están en eso".
El viernes 10 tuvieron una reunión con autoridades policiales, pero las respuestas son siempre las mismas que se escuchan en cada barrio donde hay quejas: son menores y no se puede hacer nada, y piden a los vecinos ser "más solidarios", es decir oficiar de vigilantes e interceder cuando ven que alguien está sufriendo un ilícito. Pero la mayoría en esta zona son trabajadores y están casi todo el día afuera de la casa, es la respuesta que les dieron.
"Es un peligro porque andan armados, el otro día se corrieron en motos y se tirotearon a lo cowboy", recordó un vecino. "Es jodida la mano, no sé cómo lo van a solucionar", lamentó.
"Yo he denunciado un montón de cosas que me robaron y nunca apareció nada. A una garrafa los ladrones la pueden vender de camino, pero otras cosas como herramientas más específicas no las pueden vender tan rápido, tienen que estar por ahí", insistió.
Otro de los vecinos que sumó su queja manifestó: "Es como que hace un año y medio liberaron la zona. A ningún vecino lo escuché que haya recuperado nada, es increíble", dijo, y reclamó: "No quiero que me choreen más".
Acerca de la venta de droga, muchos se sorprenden de la impunidad con que lo hacen quienes están en el negocio, sin mucha intención de ocultarse. Incluso recuerdan que cuando fue la Fiesta de Disfraces, a cada rato llegaban vehículos y bajaba gene disfrazada a comprar marihuana o cocaína.
Este barrio está comprendido en la jurisdicción de la comisaría 13ª, una zona bastante amplia pero no está tan densamente poblada como para no saber quién roba o dónde pueden guardar las cosas. Si hace falta más personal policial o patrulleros para reforzar la seguridad, los vecinos piden que simplemente se destinen a la zona.