Juan Manuel Kunzi / De la Redacción de UNO
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Paraná al extremo empezó con las motos y terminó con lluvia
La segunda edición de Paraná al extremo comenzó ayer en el complejo del Thompson con algunas mangas de motocross y unas pasadas de los cuatriciclos. Al cierre de la edición estaban terminando de armar las rampas para los saltos en bicicleta y la lluvia abortó la demo de wakeboard que estaba prevista en la agenda. Entre el clima y la floja organización que estiró los horarios que estaban estipulados en la grilla se diluyó el primer día de acción.
Este año también se cambió el sector en donde se trazó el circuito. La primera vez estuvo en la playa frente a los paradores y ahora se montó en el sector en donde se levantó el estadio para el beach volley. Es decir, más lejos del agua y con pocos lugares para que el público tuviera buenos puntos de vista. Los 33º de temperatura y los 38º de sensación térmica se sintieron fuerte en el medio de la arena.
Mientras el público esperaba paciente por el comienzo del espectáculo se largó la lluvia y el panorama cambió en un instante. Mucha gente se fue y algunos pilotos salieron a probar el circuito pero a esa altura nadie sabía muy bien lo que iba a suceder. Para hoy, lo organizadores, esperan que se cumpla el pronóstico del Servicio Meteorológico Nacional que anuncia vientos y nubes que frenarían la lluvia. El cambio favorecería las condiciones para cumplir la agenda.
Expectantes
Para las 17 está previsto que el team Los Navarro realice la exhibición de freestyle en Motocross que es reconocida internacionalmente. En la previa se hará una demo de BMX y luego de los saltos de los hermanos Navarro se largará una carrera de kartings en las calles internas del complejo. A las 19 se realizará la segunda tanda de saltos en bicicletas y según lo que anunció la Secretaría de Turismo de la Municipalidad, a las 20.30 comenzará la segunda aparición del team Navarro.
Convocantes
Si hay algo que dejó en claro la segunda edición de Paraná al extremo es que el público responde a la convocatoria. En la ciudad y la región sobra gente interesada, y motivada, en ver espectáculos de destreza en deportes extremos. Eso sí, ayer entre la lluvia y el retraso en el comienzo de las actividades, la gente se miraba sin entender muy bien lo que estaba pasando, lo que motiva a dejar un aporte para mejorar de cara a lo que se viene. Además, un detalle: faltaron servicios porque los paradores quedaron lejos.
Los espectadores siguieron las alternativas de pie durante toda la tarde y muchos llegaron a las 16 para ganar lugar. La organización tendrá hoy, entonces, una segunda oportunidad.
Las dos caras
El comienzo del primer día estaba previsto para las 16 y los pilotos esperaron la largada debajo de las carpas soportando el calor de enero.
A las 17.30 el cielo se oscureció y en pocos minutos se largó un fuerte chaparrón que dispersó a gran parte del público. Sobre todo a los que llegaron desde el río.