La denunciante es una joven de 20 años que hace tres abandonó la vivienda familiar para viajar junto a su pareja a Buenos Aires. En los últimos días, apenas retornó a Colonia Primavera, se contactó con sus hermanas y allí se enteró que sufrían los mismos abusos que ella e incluso peores, ya que a los ataques sexuales se había sumado un hermano mayor, de 28 años.
Pese a que los hombres estaban armados y habitualmente amenazaban a las cinco hermanas con escopetas, la joven venció el miedo y se dirigió a la Comisaría de la Mujer de San Pedro, donde realizó la denuncia.
Fuentes policiales dijeron que las hermanas abusadas tienen doce, catorce, diecisiete, veinte y veinticuatro años. Una de ellas es madre de cuatro chicos pequeños y ahora la Justicia deberá determinar si son producto de las violaciones.
El acusado es el padre, un hombre de 54 años, y sus dos hijos varones, uno de 22 años y otro de 28. Este último logró escapar y todavía no fue hallado por la Policía.
Al allanar la vivienda, los policías encontraron dos escopetas y varios cartuchos. Esas armas eran utilizadas para amenazar a las víctimas y lograr así que no revelaran el calvario que sufrían desde hace varios años.
Fuentes policiales revelaron que apenas se sintió más segura, la mayor de las hermanas fue quien involucró al ahora prófugo.