De chico Tomás Zandomeni no tuvo la oportunidad de asistir a un club. Asimismo, los caminos de la vida lo llevaron a adquirir pasión por la actividad física, y desde de ahí edificó su vocación por la docencia. El amor nació en el Secundario, donde fue determinante el aporte brindado por los profesores que lo formaron en el colegio nacional N° 1 Domingo Faustino Sarmiento, especialmente en la figura de Roberto Pullido.
Tomás Zandomeni, el profe que educa en las redes sociales
Por Matías Larraule
Mientras transitó su último año en la educación media Toto inició los primeros cursos. En ese entonces no proyectó desarrollar el profesorado de Educación Física, aunque en su interior sabía que no había otras alternativas educativas. En el entrenamiento, y especialmente la docencia, descubrió su espíritu formador.
Su capacitación académica la llevó adelante en el Instituto de Educación Superior (IES), donde se cruzó nuevamente con Pullido, el profesor que le transmitió los primeros conceptos sobre la educación física. Rápidamente se comprometió con la causa. Con el objetivo de reunir fondos para adquirir material de entrenamiento y de estudio se integró al Centro de Estudiantes. A fines de 2019 se graduó de profesor de Educación física.
Toto desarrolla su profesión en un gimnasio de Paraná, donde trabaja con grupos y también brinda clases personalizadas. A su vez comparte sus conocimientos a toda la comunidad a través de las redes sociales. En este espacio exhibe el manual pedagógico para transmitir consejos de entrenamientos a personas que se encuentran en un nivel inicial y avanzado. “Educando matás un montón de males”, definió Zandomeni, en diálogo con Ovación.
A través de la cuenta personaltotozandomeni, en instagram, Tomás transmite un mensaje claro y sencillo. Lo grafica con imágenes y videos donde señala errores frecuentes que se realizan en los entrenamientos. A su vez explica los movimientos indicados para cada ejercicio con el objetivo de prevenir lesiones.
“Comparto información desde la educación porque ser profe es ser docente y entrenador. Realizo posteos de una manera asequible para que la gente lo entienda porque si me pongo a hablar de fisiología van a decir “qué es esto”, y van a salir. Por eso trato de transmitir un mensaje claro para que la gente entienda, se eduque y aprenda la importancia de los movimientos, los entrenamientos y de una buena calidad de vida. Desde lo más mínimo a lo más complejo”, explicó.
Toto aclaró que no busca transformarse en un influencer. “Transmitir los conocimientos se da de una manera natural. Lo hice toda mi vida. Desde que aprendí a buscar cosas por mí mismo hasta que comencé a enseñar a las personas cómo deben realizar determinados movimientos. Es natural para mí y lo encontré en las redes sociales para hacerlo masivo”, relató.
Luego agregó: “Cuando brindás buenos contenidos la gente se interesa. Mi generación aprendió a buscar la información a través de la tecnología y se adecua a lo que tiene más cerca. Si tenés más cerca un profesor de Paraná, Entre Ríos, que te dice que las cosas están buenas, que la ciudad tiene determinada cantidad de alternativas, es un punto específico para arrancar. Ahora si tenés un profe que tiene un gimnasio tremendo, que te enseña a hacer sentadilla con barra olímpica, discos de caucho, eso es una realidad bastante diferente. Con una silla, en tu casa podés hacer determinados ejercicios y vas a tener el mismo resultado, pero te ves menos vistoso”, diferenció.
Claro que para desarrollar una rutina física de manera virtual el entrenador debe realizar un seguimiento al alumno. “Uno no tiene reglas generales, sino pauta de entrenamientos. Tenés que ir de A a B. Lo que pasa en el medio dependerá de la persona, de cuánto entrenamiento previo tiene, de la edad, si tiene una lesión. El entrenador tiene que hacer un seguimiento sí o sí y tener en cuenta todo”, afirmó.
“El profesor necesita estar cerca del alumno y mirar lo que sucede. Tiene que recibir el video, tener software para ubicar imágenes en cámara lenta, chequear si la técnica está bien implementada, si hay inestabilidad, si una rodilla se mueve hacia la izquierda o la derecha. Si los pies se hunden hacia adentro o hacia afuera. Si el movimiento parece que está bien, pero al verlo en low motion hay algo que llama la atención. Esas inestabilidades, a largo plazo, pueden generar lesiones”, concluyó.