Buschiazzo tomó la decisión de volver a defender los colores del elenco de Villa Uranga y compartir el día a día con amigos, luego de disfrutar del crecimiento de su pequeño hijo Estéfano que hoy tiene dos años y medio. "Estoy contento por los minutos que jugué, costó un poco y soy consciente que me falta ritmo para volver a estar en mi mejor", comentó el delantero entre risas.
De ahora en más, Diego seguirá entrenando y disfrutando de cada momento con sus compañeros de Instituto. En cuanto a su carrera deportiva, surgió de Universitario. Luego pasó por Patronato, donde debutó en Primera División y tras un paso por el fútbol santafesino volvió al conjunto de calle Grella.
Antes de llegar a Instituto, pasó por el fútbol de Paraná Campaña. En La Gloria se coronó bicampeón en 2015, donde logró el ascenso a la élite de la LPF.
"Nunca me voy a olvidar de las personas que estuvieron a mí lado en los buenos y malos momentos. Hay colegas que siempre enviaron sus mensajes y que nunca dejaron de escribirme para saber de la evolución. Estoy agradecido a Dios por todo lo que me ayudó para salir adelante", cerró el delantero.