Betina Jozami está de vuelta insertada en el ámbito deportivo, pero esta vez no en el tenis, sino en el básquet. Después de haber abandonado el deporte blanco a los 21 años, la paranaense estudió Administración de Empresas, vivió en México y Estados Unidos, y regresó el año pasado a su Paraná natal. Ahora integra el primer equipo del Paraná Rowing Club donde suma una nueva experiencia deportiva. “Dejé de jugar cuando tenía 21 años. Ahí fue cuando empecé a estudiar Administración de Empresas. A los 26 egresé y me salió una oportunidad laboral en Ciudad de México, en una Consultora de Marketing. En México estuve tres años y dos más en Boston, Massachusetts como profesora de tenis”, le dijo a Ovación la exjugadora de tenis y luego habló de su regreso a casa: “A Paraná volví a fines del año pasado con muchas ganas de instalarme y quedarme cerca de los afectos”, explicó.
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Por Andrés Martino
Betina llegó a Paraná con la idea de intentar insertarse en otra disciplina deportiva y el básquet fue la mejor opción. “Con respecto al básquet siempre tuve ganas de practicar un deporte grupal y el básquet es mi deporte preferido entonces decidí aprender y en febrero arranqué en Rowing. Luli Puntin, jugadora de Primera, me invitó a unas prácticas en la pretemporada y de a poco me fui incorporando cada vez más. Hay muy buena predisposición por parte del cuerpo técnico con Andrés Grancelli como DT y Martín Savat como preparador físico, como así también las jugadoras del equipo y eso me genera motivación”, confesó y agregó: “Debido a la situación pandémica en la que estamos viviendo pudimos entrenar un par de semanas, pero definitivamente por mi altura voy abajo del aro de pivot, de 5. Recién estoy aprendiendo a ubicarme en la cancha (risas)”.
Jozami habló del tema del momento: el coronavirus. “Es un momento de muchos cambios, la cultura, las costumbres, la gente, todo está cambiando de manera repentina. Intento reorganizarme y tener una rutina, adaptándome a las circunstancias lo mejor posible. Pienso que lo mejor no es esperar que termine, sino hacer ajustes permanentes y adaptarse a la situación. En casa estoy leyendo, mirando series o películas, medito, hago un poco de ejercicio virtual y también estoy bastante conectada con familia y amigos”.